Los legisladores opositores al proyecto de ley denunciaron que esta iniciativa era una violación de la soberanía nacional colombiana y ponía en peligro la seguridad del país.
Por otra parte, los representantes destacaron que, en medio del proceso de paz con las guerrillas, el Gobierno no puede llegar a "acuerdos para la guerra".
“No es coherente desarrollar una política de paz para ponerle punto final a la guerra colombiana y entrar en el tratado militar más grande del planeta”, declaró el representante Iván Cepeda, durante una entrevista televisiva.
Cepeda se refirió también a que "no sería comprensible que el Gobierno de Juan Manuel Santos, que recibió un mandato en las urnas para que selle un proceso de paz, sea el mismo que lidere la inclusión de Colombia en el pacto militar más poderoso del planeta".
El citado proyecto, presentado por el Ejecutivo colombiano, tiene como propósito establecer una cooperación militar entre Colombia y los países miembros de la OTAN.
Desde noviembre de 2012, el Gobierno de Santos mantiene diálogos de paz en La Habana, capital cubana, con las FARC, guerrilla que cuenta con unos 8 mil combatientes; además la semana pasada anunció el comienzo de negociaciones con la segunda guerrilla, el ELN, con unos 2500 combatientes, según las autoridades.
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