A días de realizarse la Cumbre de Marrakech, donde se
concretará la firma del Pacto Global Migratorio, el Comité Internacional
de la Cruz Roja (CICR) destacó en una declaración que los migrantes
son, ante todo, seres humanos.El sufrimiento padecido durante un viaje migratorio o en los países de destino puede ser inmenso y suscitar graves preocupaciones humanitarias, advirtió el organismo que trabaja a escala internacional para prestar ayuda humanitaria.
En una declaración consignó que la separación familiar, el trauma de
por vida, el abuso, la explotación, e incluso la muerte o la
desaparición, forman parte del viaje. Por ello, el CICR instó a los
estados miembro de la ONU a adoptar y aplicar el Pacto Mundial para la
Migración, el cual fue cofacilitado por México y Suiza.
En entrevista, Alberto Cabezas Talavero, oficial de información de la
oficina regional para México y Centroamérica, expuso que la República
Mexicana, como país de origen, tránsito y destino de migrantes, es un
buen ejemplo de la complejidad que entraña el proceso migratorio no sólo
en nuestra región, sino en todo el mundo.
Expresó que este acuerdo es importante al ser un primer
encaminamiento global hacia un compromiso mayor. “Necesitamos ir más
allá de repetir buenas intenciones para tratar que se reduzcan las
dimensiones –que son inaceptables- de muerte, abuso, privaciones,
etcétera que enfrentan millones de migrantes en el mundo. Es un proceso
que nos pone en la dirección correcta. De alguna manera también se
incluyen estándares mínimos de trato”, dijo.
A este pacto ya se han desmarcado naciones como Estados Unidos, a
ello, Cabezas Talavero expresó que cada país tiene su propia forma de
ver la migración, así como el derecho de adherirse al proceso.
El CICR considera que este acuerdo es necesario e importante; capaz
de aportar elementos fundamentales para mejorar la atención a temas como
la desaparición de migrantes, o atender mejor la detención de personas
en situación de movilidad.
Es decisión de cada país cómo se relaciona con este proceso, pero nosotros sí podemos decir que animamos a que los estados se unan porque es una forma de aliviar el sufrimiento de las personas migrantes, que fundamentalmente son vulnerables.
Ana Langner
Periódico La Jornada
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