“Mi nombre: Raúl Antonio Carvajal Londoño; A las 12 y 40 del día 8
de octubre del año 2006, fui asesinado a la edad de 29 años, por mis
propios compañeros, al negarme a matar jóvenes indefensos para hacerlos
pasar por guerrilleros, mientras me desempeñaba como cabo primero del
ejercito colombiano
En otro lado de la geografía universal, el pasado 17 de agosto, desde la Habana Cuba, en el marco de los diálogos que adelanta la insurgencia de las FARC EP con el Gobierno Nacional colombiano, se produjo el comunicado conjunto No 41, en el que entre otras señalan: “Las delegaciones del Gobierno Nacional y las FARC- EP queremos, en primer lugar, agradecer al primer grupo de víctimas del conflicto por haber asistido a la Mesa de Conversaciones, y en especial, por haber compartido con nosotros sus testimonios, opiniones y propuestas que fueron expresados con mucho valor y franqueza”. En otro aparte del comunicado se lee: “Consideramos que este fue un momento trascendental del proceso. Desde el inicio dijimos que las víctimas estaban en el centro del Acuerdo. Con esta primera reunión en La Habana, de manera más directa, se hace realidad este propósito. Recibimos sus manifestaciones de dolor y sus demandas como un imperativo ético y moral para concluir exitosamente estas conversaciones”.
Don Raúl, por su parte continúa contándonos su drama agregando, “Álvaro Diego Tamayo Hoyos, promotor de los “falsos positivos”, mandado por Álvaro Uribe y Juan Manuel Santos, el General Padilla y el señor Pinzón, es también el comandante de mi hijo. Álvaro Diego Tamayo Hoyos fue edecán de Álvaro Uribe, comandante máximo del batallón Ricaurte, de la brigada 30, del batallón Rafael Reyes, como le digo, el era el comandante de mi hijo, a quien llevaron a asesinar a ese poco de muchachos para pasarlos como guerrilleros muertos en combate, pero como mi hijo se negó, lo asesinaron”
El pasado 16 de Agosto en la Habana Cuba, se llevo a cabo una rueda de prensa en la que participo el primer grupo de victimas que se hizo presente ante la mesa de diálogos, dando respuestas a diferentes medios internacionales; Ante la pregunta de Francisco Jara de una agencia de prensa francesa, referente a los Colombianos que se oponen o continúan siendo escépticos de que se pueda lograr la paz, la representante de las “madres de Soacha”, Luz Marina Bernal Parra, victima, como muchos otros, de lo que se conoce eufemísticamente como “falsos positivos” respondía en parte: “Sabemos que en Colombia hay muchos que están en contra de lo que se esta llevando a cabo acá en la Habana, no cabe la menor duda, pero, se supone que los que ya hemos tenido que vivir esta situación, y soy victima del estado, ya que el ejercito nacional de Colombia, o brigada móvil No 15, Asesinó a mi hijo en Ocaña, Norte de Santander; pedimos que ellos digan la verdad y quien generó toda esta sistematicidad, a lo largo y ancho del país, con el mismo modus operandi, ya que cada una de las “victimas que fueron abatidas en combate”, tuvieron un precio, no solamente su vida, sino un precio económico, sobre todo por la ministerial 029 que fue creada el 11 de noviembre del 2005, firmada por el ministro Camilo Ospina, donde allí pagan, grandes recompensas por cada abatimiento en combate; yo me pregunto, un joven de 26 años, de educación especial, que no sabia leer ni escribir, ni siquiera identificar el valor del dinero, con una discapacidad en su brazo y pierna derecha, podría realmente llegar a ser el jefe de una organización narco-terrorista, dirigir un grupo al margen de la ley? No. A ellos (los victimarios) todo lo que les importa, es los grandes beneficios que el mismo estado colombiano, el mismo presidente, les da; las grandes prebendas, como ascensos, cartas de felicitación, remuneración económica, permisos y cursos al exterior; yo creo que estas personas no merecen un indulto, merecen es que lleguemos, al alto mando generador de todos estos crímenes de lesa humanidad, porque eso es, como se llaman”.
En Colombia, mientras tanto, no desde los sectores de ultraderecha que se oponen, o pretenden manejar a su acomodo el caso de las victimas, buscando colocar en el mismo rasero los crímenes de Estado con los de la insurgencia, a “Reporte Colombia” ha llegado de parte de “Joyeca”, nombre supuesto seguramente, de quien busca expresar su posición por este medio, un mensaje del que recogemos solo un pequeñísimo aparte, que a nuestro entender recoge lo que busca decirnos “Joyeca”. Dice así: “podríamos acceder a las súplicas de quienes le hacen apología a la alharaca por lograr una paz acomodada y a la medida de los intereses de la burguesía, pero no. Nuestro modesto pensamiento desea una paz digna, y en esa medida por supuesto que no compartimos el sofisma con el cual nos quieren mantener boquiabiertos e ilusionados en alcanzar una supuesta paz que a la larga termina siendo un total engaño.De modo que siendo sinceros, justos y consecuentes con los principios humanizados, podemos decir que la verdadera paz humana tiene indiscutiblemente un sello de clase, y que por lo tanto, en una sociedad como la nuestra que ocupa a nivel mundial el deshonroso lugar de estar entre los cinco países más desiguales y a nivel Latinoamericano ocupar el primer lugar después de Haití, no solo es absurdo aspirar que los colombianos convivamos en paz, sino que tal pretensión raya con el cinismo”.
Agrega además el amigo “Joyeca”: “Y para la muestra un par de ejemplos sobre la verdadera catadura ideológica y política de la clase dominante: incumplimiento por parte del gobierno de turno a miles de campesinos de distintas comunidades, (etnias, afrodescendientes y otros sectores del agro) de casi todas las regiones de nuestro territorio nacional, que hicieron justas exigencias en sus movilizaciones masivas durante varios días, como protesta a las políticas mezquinas y abusivas del Estado colombiano contra este sector fundamental en la economía de nuestro país”.
Por su parte, la Red de Medios Alternativos y Populares (REMAP), publicó un articulo bajo el titulo de “Triunfa el Paro del Pacífico en primera reunión con el Gobierno”, aparecido el pasado 20 de agosto en el portal de Rebelión, que señala entre otras:“Ante el poder de movilización y resistencia de las comunidades del Pacífico, el Gobierno no tuvo otra medida que empezar a ceder a las exigencias de la mesa de coordinación del Paro que presentó y lideró los tres puntos de la agenda. Agrega en otro de sus apartes el mencionado articulo: “Trataron de negarlo, esconderlo y borrarlo de los medios de comunicación, pero al final, el Paro Regional del Pacífico contra la corrupción se impuso y el Gobierno debió llegar hoy hasta la Costa Pacífica nariñense, más precisamente al municipio de Santa Bárbara de Iscuandé, para reunirse con los voceros de los once municipios de los departamentos de Cauca y Nariño que desde el 10 de agosto se declararon en Paro”.
Un claro ejemplo de cómo las comunidades con su fuerza organizada y movilizada, son capaces de convertir una negra noche en un radiante día. Como lo que también ha venido haciendo, con su persistencia, don Raúl, quien sin acompañamiento de ONGs, ni de la ONU, menos aun de organismos gubernamentales, desde hace ocho años busca esclarecer lo relacionado con la muerte de su hijo Raúl Antonio Carvajal Londoño, de 29 años al momento de su asesinato, cuando le servía a la patria, como suboficial del Ejercito, en el batallón Ricaurte con sede en Bucaramanga.
Entre otras, Camilo de los Milagros, en su articulo “Comparaciones odiosas”, publicado en Rebelión señala: “Con horror se constata que el 70% de los crímenes cometidos en el marco del conflicto armado son atribuidos al Estado o sus agentes paralelos, mientras ni siquiera el 20% corresponde a los grupos subversivos. Es una desproporción aterradora que no se corresponde para nada con la narrativa oficial. Las cifras corresponden a mediciones de las Naciones Unidas, a los datos del CINEP e incluso a la Comisión de Memoria Histórica que financia el mismo gobierno nacional”.
Al decir de don Raúl la versión que le dieron los altos mandos militares es que su hijo había caído en un combate con la guerrilla en el municipio de El Tarra, Norte de Santander, pero finalmente pareciera ser un crimen de estado al que don Raúl llama el papá de los “falsos positivos”.
Don Raúl una victima mas en el País, señala que no se siente representado en la Habana, porque a su decir “un representante no puede decir lo que uno dice”, aunque quisiera poder asistir allí, para que el mundo sepa, “que no fue la guerrilla la que mato a mi hijo, sino que fueron las fuerzas militares” y para que finalmente se investigue su caso, al que nadie quiere investigar, por eso, porque es el “papá” de esos crímenes, “que en la medida en que de luces, podría llegar a dar a conocer todo lo que se ha movido detrás de estos crímenes, por eso es que creo que no quieren que se investigue”. Mientras tanto, Don Raúl continuará buscando justicia.
Y RECUERDEN……
Todos los sábados, “Alternativa Latinoamericana del Canadá” http://alternativalatinoamericana.blogspot.com/ trasmite en español un programa de tres horas y en la primera hora del programa se transmite “Reporte Colombia”, un programa de 30 minutos sobre el acontecer colombiano, realizado por el colectivo “Radicales Libres”, que puede ser escuchado igualmente por CFRU.CAhttp://cfru.ca/, a partir de las 6 PM hora canadiense. Este sábado 23 de AGOSTO, no deje de sintonizarse y escuche “Reporte Colombia”.
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