Baltasar
Garzón, el abogado del informático y periodista australiano, Julian
Assange, ha comunicado este jueves su decisión de pedir la intervención
de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en el caso de su
cliente.
En su visita a Guatemala para asistir al V Foro Esquipulas, dirigido a promover el desarrollo de la región centroamericana, el jurista español ha denunciado, también, el estado de indefensión del fundador de Wikileaks.
De igual manera, Garzón calificó de “un trato inhumano” los dos años que Assange ha estado encerrado en la embajada de Ecuador en Londres, capital del Reino Unido.
En cuanto a su situación legal, ha informado sobre sus esfuerzos para que la libertad de Assange sea reconocida por el Tribunal de Apelación de Estocolmo (Suecia), que en el caso de no lograrlo, recurrirían al Tribunal Supremo de Suecia.
El creador de Wikileaks, que desde el 19 de junio de 2012 se encuentra en calidad de asilado político en la sede diplomática ecuatoriana en Londres, es requerido por la Justicia sueca por acusaciones que lo incriminan en delitos de agresión sexual.
Sin embargo, el activista niega las acusaciones y asegura que tal solicitud sueca es una maniobra para entregarlo a Estados Unidos, donde teme ser condenado por revelar en 2010 miles de documentos confidenciales sobre las irregularidades y violaciones cometidas por Washington en las guerras en Afganistán e Irak, 2001 y 2003, respectivamente, entre otros temas.
El pasado martes, durante una rueda de prensa, Assange desmintió que tomó esta medida por presuntos problemas de salud e informó su “pronta” salida de la embajada de Ecuador.
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