El
Partido Socialista Brasileño (PSB) oficializó el miércoles la
candidatura de Marina Silva a las presidenciales de Brasil, como la
sustituta de Eduardo Campos, quien falleció hace una semana en un
accidente aéreo.
"Tuvimos la inmensa suerte de tenerla como sustituta", dijo a la prensa el presidente del partido, Roberto Amaral.
"Daré lo mejor de mí", señaló Marina Silva, que abogó por un Brasil "más justo, económicamente próspero, socialmente justo, políticamente democrático, ambientalmente sostenible".
Tras el anuncio de la candidatura de Silva, quien era la compañera de fórmula de Campos, el aspirante a la vicepresidencia será el diputado federal Beto Albuquerque, después de que la primera opción para completar la fórmula de Silva, Renata de Campos, viuda del fallecido abanderado, rechazara tal puesto.
Esta decisión del PSB, a menos de dos meses de las elecciones del 5 de octubre, supone un cambio radical en el panorama electoral de la mayor economía de América Latina y séptima del mundo.
Una encuesta divulgada el lunes, la primera tras la muerte de Campos, mostró que Silva podría ganarle a la presidenta y candidata a la reelección, Dilma Rousseff, de 66 años, miembro del Partido de los Trabajadores (PT).
El miércoles pasado, siete personas perdieron la vida, entre ellas el entonces aspirante a la presidencia de Brasil por el Partido Socialista (PSB), Eduardo Campos, cuando cayó el avión en el que viajaban en la ciudad costera de Santos.
aaf/anz
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