México, 21 may (PL) Las manifestaciones de los últimos tres días de miles de estudiantes en esta capital y en 17 ciudades del país le dan hoy un ingrediente de interés a una campaña electoral que transcurre sin grandes sobresaltos en Mexico.
Las movilizaciones, que arrancaron en contra de la manipulación informativa y la opacidad de la cual acusan a las cadenas televisivas, en especial Televisa, tuvo su detonante en la visita que hace dos semanas realizara a la Universidad Iberoamericana el candidato presidencial de la coalición Compromiso por México, Enrique Peña Nieto.
El encuentro, nada feliz para el aspirante a la silla de la Residencia Oficial de Los Pinos el próximo 1 de julio, fue la ocasión para que en el alto centro docente expresaran sus inconformidades con la nomenclatura del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y su abanderado.
Los jóvenes le reprobaron particularmente el justificar la represión contra pobladores de San Salvador Atenco en el 2006, cuando era gobernador del Estado de México.
Fue así como el viernes los universitarios salieron a las calles en un movimiento espontáneo surgido en solidaridad con los alumnos de la Iberoamericana, que se está posicionando en Internet y lleva varios días como tema principal en Twitter.
La motivación: dejar en claro que los medios de comunicación fomentan un sesgo que favorece a uno en detrimento de otros en el actual proceso electoral.
Educandos de ocho centros de educación superior, entre ellos la Universidad Nacional Autónoma de México y la Universidad Iberoamericana, agrupados en lo que han denominado la Unión Universitaria participaron en la jornada de protesta.
"Estudiantes informados, jamás manipulados. No nos impondrán a Enrique Peña Nieto", decía el mayor de los carteles, colocado al frente del destacamento de casi 400 estudiantes que se plantaron frente a Televisa.
Al día siguiente, el sábado, también convocados por las redes sociales, miles de mexicanos, en su mayoría jóvenes, avanzaron desde el Zócalo de la ciudad hasta el Ángel de la Independencia en una caminata denominada "anti-epn", en alusión a las iniciales de Enrique Peña Nieto.
La estudiante Elisa Maldonado, de 21 años de edad, expresó a Prensa Latina que los partidos políticos son como "una sanguijuela institucional gigantesca y ya no es posible seguir manteniendo a los políticos con sus sueldos millonarios, porque mientras eso siga así nada cambiará en México".
Señaló que todos los manifestantes, jóvenes y lo que son menos, algo en común tienen: el rechazo a que las televisoras traten de imponer a un presidente y negó que fueran acarreados (pagados).
Ayer domingo el Zócalo se volvió a llenar con jóvenes y esta vez en abierto apoyo al candidato de las izquierdas Andrés Manuel López Obrador. Según estimados de prensa se reunieron en la Plaza de la Constitución alrededor de 46 mil personas.
Sobre lo ocurrido allí reseñó el diario La Jornada: "Extraño mitin en tiempos de campaña sin políticos, incluso sin la presencia personal del tabasqueño (López Obrador), cuya imagen se reprodujo por miles en la diversidad de la imaginación popular o en consignas".
También se conoció que decenas de connacionales residentes en Estados Unidos se manifestaron frente a la Casa Blanca (Washington) y en Nueva York en respaldo al candidato del Movimiento Progresista.
A los comicios del 1 de julio están convocados unos 80 millones de ciudadanos, de ellos 14 millones ejercerán su derecho al sufragio por primera vez.
Serán elegidos el Presidente de la República, el Congreso de la Unión (500 diputados y 128 senadores), seis gobernadores y el jefe de gobierno del Distrito Federal, entre dos mil 127 puestos públicos.
De momento, este es un capítulo que recién comienza, apuntó la estudiante Maldonado, cuando en algunos medios de prensa hoy se aventuran a preguntar: "¿será la primavera mexicana?"
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