Aunque la reunión es de carácter privado y a puertas cerradas, por las redes sociales de Internet se difundieron las palabras del poeta Javier Sicilia, líder de la agrupación civil, al comienzo de este debate.
Sicilia volvió a demandar el impulso de una legislación fundamentada en la seguridad humana y ciudadana.
Solicitó una vez más aprobar una ley compatible con las libertades públicas, y que sienta las bases para alcanzar la paz y terminar la violencia, que suma en los últimos seis años más de 50 mil muertos, 10 mil desaparecidos y 120 mil desplazados.
Ante los diputados, el activista reiteró la agenda acordada en el diálogo conjunto en el Castillo de Chapultepec, donde se propusieron trabajar en la conformación de una Ley de Víctimas y un fondo de apoyo inmediato para ellas.
También se convenió, recordó Sicilia, la creación de una Comisión de la Verdad, auditores especiales, consejeros ciudadanos en el Consejo de Seguridad, además de una reforma del marco legal en la cual se tipifiquen como delito federal las desapariciones forzadas.
Igualmente se acordó impulsar una ley que persiga el lavado de dinero y la realización de una Reforma Política que aliente la democracia participativa, entre otros puntos para reconstruir el tejido social del país.
Sicilia insistió que su movimiento no propone una claudicación frente a la delincuencia, ni abandonar su combate.
"Lo que nosotros buscamos es corregir de raíz las causas que generan la violencia: el desgarramiento del tejido social, la desigualdad creciente, la corrupción y la impunidad", reiteró.
Explicó además que la minuta de la Ley de Seguridad Nacional enviada al Senado privilegia la seguridad de las instituciones del gobierno sobre la de los seres humanos y crea un marco legal para continuar la estrategia bélica del actual gobierno.
Al final de esta reunión, a la cual asisten activistas sociales, víctimas de la violencia y líderes de las bancadas de diputados, se espera un pronunciamiento de ambas partes.
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