La incertidumbre embarga a los ministros paraguayos ante rumores de cambios como parte de un supuesto paquete de acuerdos del jefe de Estado, Fernando Lugo, con partidos aliados en un plan de fortalecimiento de su gobierno hasta el fin de su mandato en el 2013.
"¡Todavía soy ministro!", exclamó hoy entre en serio y en broma ante periodistas acreditados el ministro de Educación, Luis Riart, tras abandonar el despacho de Lugo tras una reunión del consejo de ministros.
El cambio de Riart fue anunciado por los matutinos este lunes, entre otros seis a ocho secretarios de Estado.
En forma unánime, los medios de prensa atribuyen los "inminentes" cambios a una transacción iniciada por Lugo para que el Senado, de mayoría opositora, apruebe una enmienda que le permita postularse en el 2013 como senador activo con voz y voto.
La Constitución paraguaya establece que el saliente presidente del país debe asumir como senador vitalico, un cargo honorífico, con voz pero sin voto ni salario.
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