Perú
El Gobierno de Vizcarra sufre el desprestigio por el desorden, la
corrupción y la incompetencia, pero aun mas el conjunto de las
instituciones estatales gestionadas por una organización criminal
política ampliada –el fujiaprismo voraz y pragmático– que controla el
Congreso, favorecidos por un gran fraude. Este Congreso se sigue
deslegitimando ante la sociedad, llegando a perder totalmente la
confianza y hasta la posibilidad de interlocución y relación con cada
vez más amplios y muy disimiles sectores sociales, cosechando un rechazo
del 80%. El ejecutivo cohesionado entre el mando y la obediencia y un
poder judicial dividido en al menos dos tendencias, una corrupta y la
otra sin la fuerza suficiente para encarcelar a los corruptos. El pueblo
esta harto de espectáculos políticos que les resultan ajenos, pero que
sin embargo, consideran que deben optar por el menos malo, y eso por que
los medios crean dos antagonistas que en realidad estan umbilicalmente
familiarizados y sus diferencias son temporales y de táctica. Entre
acuerdos y desacuerdos en las altas esferas, entre oscuros pactos y
desencuentros tacticos entre los mas y los menos corruptos esta el
pueblo aturdido, buscando una salida en un caudillo que tambien se lo
niegan, pues en eso si concuerdan en aplastar la resistencia al despojo.
Ocurre que no queremos pensar con autonomía, no intentamos tener una
interpretación critica y forjar una conciencia soberana y por ello es
aun más preocupante la actitud de muchos devenidos críticos, entregados a
la búsqueda de opciones de cambio efectivo por canales institucionales
ya pervertidos.
El contexto coyuntural donde se dan estos
hechos son los últimos 29 años del ciclo neoliberal que estuvieron
marcados por un prolongado proceso de crisis política en incierto
desarrollo: ninguno de los ex presidentes elegidos logró librarse de
acusaciones, los partidos políticos perdieron credibilidad y
legitimidad, y lo mismo ocurrió con los poderes y las instituciones
estatales: el gobierno, el parlamento, el sistema judicial, la policía,
las fuerzas armadas; incluso la Iglesia y la prensa se encuentran en los
puntos más bajos de aceptación. En fin, crisis de legitimidad, de
hegemonía, crisis de gobernanza, crisis del reégimen político y crisis
del representacionismo liberal. Todo ello enmarcado en una enorme crisis
civilizatora del capitalismo.
Y aquí vale la pena distinguir
entre crisis de gobernanza y de gobernabilidad. La gobernanza es una
categoría neoliberal que se refiere a la “introducción legitima” de los
empresarios, del poder económico en la política, y creemos que vive una
crisis cuando se destapa esta relación como corrupta, cuando este poder
semioculto se visibiliza con nombres y apellidos (Benavides, Graña,
Rodriguez Banda, Larrea, etc) como organización criminal: la Confiep.
Pero hay otro aspecto mas político y es que la gobernanza es una
categoría que une la economía y la política que habia separado ambos
elementos por el liberalismo como un gran aporte. Mientras que en la
perspectiva de la gobernabilidad, el problema y su solución emana desde
las capacidades del gobierno, con cierta independencia de la sociedad.
Esta incluye hegemonía y legitimidad que estan cuestionadas, pero en la
medida en que estas dependen y mucho de medios controlados por el poder,
aunque ambas relaciones y sus acepciones indican que existe una crissis
en proceso, se mantiene la capacidad de gobernar, no obstante
que la ejerce de modo esquizofrenico para mantener la confusión, como
cuando Vizcarra dice que no se puede imponer la mineria a sangre y fuego
y al mismo tiempo envia a polivias y soldados a reprimir a la
resistencia al despojo, un conflicto en las alaturas que no termina en
una real ingobernabilidad. Sigamos analizando.
El perú esta
atrapado en una confusión creada en las alturas –como ya dijimos- por
las diferencias políticas entre dos tendencias de derecha respecto a
como ejercer la dominación, se debate: si Vizcarra debe irse de
inmediato y dejar a Araoz en la Presidencia o si debe cerrar el Congreso
y convocar a elecciones. En otras palabras han transformado la lucha
popular por “que se vayan todos” y contra el despojo, en otra que busca
obligar a la ciudadanía a escoger entre Araoz y Vizcarra. Esta
diferencia surge de otra contradicción entre la imposición por la fuerza
de la recolonización y saqueo minero (Benavides de la Confiep) o hacer
lo mismo a traves de la negociación politica, la policia y la compra de
voluntades (Vizcarra). Olaechea y Araoz, obedecen al jefe Benavides de
la Confiep y quieren imponer a sangre y fuego el despojo minero en Tía
María y en el país con el apoyo politico del fujiaprismo en el Congreso y
el poder judicial, mientras que Vizcarra y Del Solar tambien buscan lo
mismo solo que optan por la represión blanda, donde puede ser aceptable
que haya heridos y presos pero no muertos, quiere terminar su tiempo
presidencial cuidando su aprista “apellido”. Los medios mermeleros,
asalariados por la Confiep, exigen elegir entre estas opciones y otros,
mercenarios de Vizcarra, optan timidamente por el cierre del congreso .
Ante este dilema lo que corresponde al pueblo es persistir en que se
vayan todos, aunque por partes, me explico. Creo que para las fuerzas
democraticas lo urgente es llevar la crisis de gobernabilidad y del
régimen a sus límites para un cambio de goberno, abrogación de la
Constitución y transformacion de las instituciones y para conseguilo
persistir en cerrar el congreso ya, por que es corrupto y mercenario,
por que el proceso a la corrupción debe seguir y no perdonar a nadie,
embestir contra un parlamento que ahora sirve a la Confiep y mañana no
sabemos a que delincuentes, por que pretende dejar desprotegidos a
jueces y fiscales honestos, por su defensa de la inmunidad y la
impunidad y por que principalmente hacen todo esto ante el temor a que
la lucha contra la corrupcion finalmente tambien acabe con partidos,
sectores institucionales y otros sujetos que forman parte del sistema de
la corrupción o sea, todo el sistema de dominación. Mientras, deberían
continuar las luchas regionales contra el saqueo, contra tanta agresión
ambiental y social, por una nueva constituyente y pugnar por la
organización nacional de las luchas. Cerrado el Congreso, no hay que
cejar en la lucha contra el sistema corrupto de politicos y empresarios,
diseñemos un proyecto basico de pais anticolonial, soberano,
autodeterminado, desde abajo y preparemonos para las elecciones y
disputar en ese terreno de la dominación el poder político.
Por
otra parte, no nos perdamos en el camino, no nos dejemos engañar por la
manipulación mediatica que nos lleva de la mano a escoger entre lo
menos malo y lo mas malo. Que nos quede claro que no se trata de quien
es mas o menos democraticos, pues se trata tan solo de dos caminos al
infierno. Definamos un tercer camino, que es el de la izquierda
congresal y sus dos tendencias y otra izquierda de viejos partidos
contaminados por la ambigüedad, compromisos oscuros y que camina tras
las opciones de la derecha. Pero hay otra izquierda, que esta enraizada
en los pueblos, que no se corrompe facilmente aunque puede ser victima
del clientelismo y las dádivas y a ella nos dirigimos. Pues creemos que
debemos tener la autonomia suficiente como ciudadanos democraticos para
buscar otro camino, nuestro, del pueblo, al margen de partidos (de
derecha o izquierda), estrategias construidas o de fragiles lideres que
los estan encerrando o dejando encarcelados uno a uno: Cerrón, Aduviri,
Antauro, Caceres Llica?, sin abandonar su defensa en las calles,
definamos nuestro proyecto que desde abajo es garantia de éxito como lo
hemos visto en el magisterio, en las Bambas, en Cajamarca, en el
Moqueguazo, en Tia Maria, etc. solo que ahora uniendo las luchas a nivel
regional y nacional, muy organizados y con delegados sustituibles,
reemplazables, si no acatan lo que se decida abajo. Solo destruyendo el
corrupto sistema judicial impediremos la criminalización y
judicialización de la politica. Seamos firmes y agresivos en la defensa
de nuestros territorias y riquezas, contra el despojo, por que son
nuestras, no de los extractivistas y rentistas de la Confiep o de los
politcos convertidos en lumpen empresarios.
Esta compleja coyuntura, esta situación es vista como crisis política, estamos de acuerdo pero vista como proceso y es lo revisaremos mas a fondo en la proxima entrega.
No hay comentarios:
Publicar un comentario