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lunes, 1 de agosto de 2016

Colombianos esperanzados sobre posibilidad de acuerdo con FARC-EP

Imagen activaPor Adalys Pilar Mireles
Bogotá, 1 ago (PL) El optimismo de los colombianos frente al proceso de paz aumenta, a juzgar por los resultados de recientes encuestas encaminadas a medir el pulso del país en momentos decisivos para los diálogos entre el Gobierno y las insurgentes FARC-EP. Según un estudio realizado por Datexto Company SA, divulgado este lunes, el 57 por ciento de los entrevistados confía en que será posible un acuerdo entre los voceros gubernamentales y de ese movimiento guerrillero, quienes conversan en Cuba desde 2012 con el propósito de hallar una solución concertada al largo conflicto entre ambas partes.

Tales cifras son interpretadas aquí como una señal alentadora, al compararlas con las respuestas a similar pregunta en mayo pasado cuando sólo el 39 por ciento de los consultados confirmó que esperaba un desenlace satisfactorio de tales pláticas.

La encuesta bimestral Gallup reveló un panorama similar a comienzos de julio, pues según ese sondeo el 60 por ciento del segmento poblacional interrogado tiene esperanzas en el logro de un consenso capaz de terminar una parte de la conflagración (resta iniciar reuniones con el Ejército de Liberación Nacional, involucrado también en la guerra interna).

La gente empezó a creer que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) sí quieren la paz, comentó el director de Datexto Company SA, César Valderrama, citado por el diario El Tiempo de circulación nacional.

De mayo a la actualidad ocurrieron acontecimientos que evidentemente tuvieron una influencia positiva en la opinión pública como la firma del acuerdo entre el Ejecutivo y esa agrupación rebelde sobre el cese el fuego bilateral y la dejación de armas o desarme de los miembros de dicha guerrilla.

Tal pacto si bien no significó la implementación inmediata de las dos fases sí dejó en blanco y negro el modelo y la hoja de ruta o línea de tiempo a seguir para garantizar ambas etapas y con ellas el término de la confrontación bélica.

Luego de haber conciliado posiciones, además, en los temas de reforma rural integral, participación política centrada en la profundización de la democracia, combate contra el tráfico ilícito de drogas y víctimas, las delegaciones reunidas en La Habana deberán establecer el mecanismo para seleccionar a los magistrados del tribunal el cual aplicará la justicia transicional.

En declaraciones la víspera al periódico El Colombiano, el presidente Juan Manuel Santos explicó asimismo que están pendientes de dilucidar algunos protocolos para la reintegración a la vida civil de los futuros desmovilizados, además los equipos de negociadores perfilan otros asuntos claves referidos a la amnistía prevista en ciertos casos.

Tras el llamado Acuerdo Final el gobernante convocará a un plebiscito para que el pueblo refrende el conjunto de convenios suscritos en la capital cubana.

Y mientras la actual administración, sectores de la izquierda y otros simpatizantes de tales gestiones impulsan una cruzada por el Sí; el partido de derecha Centro Democrático, liderado por el expresidente Álvaro Uribe, promueve un "movimiento de resistencia civil" con el propósito de rechazar los resultados de los diálogos.

Esa batalla podría recrudecerse con la proximidad del ejercicio democrático, alertan analistas.

La contienda ha ocasionado la muerte a unas 300 mil personas, en tanto casi siete millones permanecen desplazadas de sus lugares de origen y al menos 45 mil están desaparecidas.

ro/ap

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