Uribe, quien presidió el Congreso de Colombia entre 2001 y 2002, "hizo pactos con la organización armada al margen de la ley" Autodefensas Unidas de Colombia, lo que "permite demostrar la comisión del delito de concierto para delinquir", reza la sentencia.
En concreto, el ex senador fue señalado de pactar con grupos paramilitares de su región de Antioquia (noroeste) para que intimidaran y presionaran a los votantes y conseguir así su elección en el Senado en 2002.
La condena a Uribe implica también una multa de 3.481 millones de pesos, equivalente a unos 1,8 millones de dólares.
El político está detenido desde febrero de 2010, cuando la Corte Suprema de Justicia ordenó su captura y asumió la investigación del caso.
El ex congresista, quien fue electo por el partido Colombia Democrática, parte de la alianza de gobierno de su primo Alvaro Uribe (2002-2010), ya había sido arrestado en abril de 2008 por el mismo caso pero recobró la libertad cuatro meses después por una decisión de la Fiscalía General, que entonces dijo no tener pruebas certeras de esos nexos.
En la condena emitida este lunes, la Corte Suprema colombiana tuvo en cuenta testimonios del ex jefe paramilitar Salvatore Mancuso, actualmente preso en Estados Unidos.
Mario Uribe llegó por primera vez al Congreso colombiano en 1994 gracias a que su primo, el entonces senador Alvaro Uribe, decidió retirarse para aspirar a la gobernación de Antioquia, que ganó.
Un cable del departamento de Estado revelado el domingo por Wikileaks en alianza con el diario El Espectador, refirió que Mario Uribe acudió en 2006 a la embajada estadounidense en Bogotá porque temía que se le retirase la visa a ese país.
Incluso, el ex senador habría presentado al entonces embajador William Wood una lista con sus candidatos al Congreso para que tachase aquellos sobre los que Estados Unidos tenía reparos, según ese cable diplomático.
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