Repudian amenazas de deportación
Parece que fue diseñada para presionar, a fin de que reabran los campus, coinciden rectores
▲ El rector de Harvard, Lawrence Bacow, publicó en el sitio web de la institución:
defenderemos con vigor que nuestros estudiantes internacionales puedan continuar sus estudios sin la amenaza de la deportación. La orden llegó sin previo aviso; su crueldad es superada sólo por su insensatez. En la imagen, edificios de la prestigiada universidad.
Washington. Escuelas de educación superior respondieron
ayer a la decisión del gobierno del presidente Donald Trump para hacer
que los estudiantes extranjeros abandonen el país si planean tomar
clases completamente a distancia el próximo semestre. La Universidad
Harvard y el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, por sus siglas
en inglés) entablaron una demanda para tratar de bloquear la medida,
mientras otras instituciones prometieron trabajar con los estudiantes
para mantenerlos en los campus.
El Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) notificó a las
universidades el lunes que los estudiantes extranjeros se verán
obligados a abandonar el país o transferirse a otra institución si sus
escuelas operan completamente a distancia el próximo semestre. No se
emitirán nuevas visas para los alumnos de esas escuelas, mientras los
que asistan a universidades que ofrecen una mezcla de clases
presenciales y a distancia no podrán tomar todas sus clases por
Internet.
La directriz señala que los estudiantes extranjeros no estarán
exentos incluso si un brote de Covid-19 obliga a que las clases sean a
distancia durante el semestre.
“Defenderemos este caso con vigor para que nuestros estudiantes
internacionales –y estudiantes internacionales de instituciones de todo
el país– puedan continuar sus estudios sin la amenaza de la
deportación”, dijo el rector de Harvard, Lawrence Bacow, en el sitio web
de la prestigiosa institución.
La orden llegó sin previo aviso; su crueldad es superada sólo por su insensatez, sostuvo en un correo a sus afiliados en que agregó que considera que la medida es ilegal.
Parece que fue diseñada a propósito para presionar a las universidades a fin de que abran sus campus para clases presenciales este otoño, haciendo caso omiso de las preocupaciones sobre la salud y la seguridad de los estudiantes, profesores y otros, añadió Bacow.
El rector de Harvard señaló que
Estados Unidos está batiendo récords diarios de nuevas infecciones, con más de 300 mil reportados desde el primero de julio, al defender la decisión de las instituciones educativas de impartir clases no presenciales para evitar focos de contagio y rebrotes.
Harvard anunció que los cursos de todo el año académico que comienzan
en septiembre serán virtuales debido a la pandemia de coronavirus.
El MIT, en tanto, sólo ofrecerá clases en persona para un número muy
limitado de estudiantes, ya que en el campus los jóvenes deberán
someterse a tests de diagnóstico al menos dos veces por semana y tener
su propio dormitorio.
Las universidades a lo largo y ancho de Estados Unidos dijeron que
los más de un millón de estudiantes extranjeros tienen un lugar
importante en sus comunidades. Muchas escuelas también dependen de los
ingresos de los alumnos internacionales, quienes generalmente pagan
cuotas más altas.
Además, crea un dilema urgente para miles de estudiantes extranjeros
que están varados en Estados Unidos desde hace meses luego de que el
coronavirus obligó a sus instituciones a impartir clases a distancia.
Aquellos que asistan a escuelas que se quedarán con las clases en línea
deben
abandonar el país o tomar otras medidas, como transferirse a una escuela con enseñanza presencial, de acuerdo con la directriz.
La semana pasada, la universidad dio marcha atrás a un plan para
llevar a los estudiantes al campus, diciendo que las clases serían
impartidas principalmente o exclusivamente a distancia. La Universidad
de Georgetown, en Washington DC, y la de Rutgers, en Nueva Jersey,
hicieron anuncios similares esta semana en medio de un repunte de casos
de Covid-19. En tanto que la Universidad de Minnesota anuncio que
revisará sus planes para el próximo semestre con el fin de garantizar
que los estudiantes extranjeros no se vean obligados a dejar el país.
Trump, quien busca ser relegido en los comicios del 3 de noviembre,
presiona para que el país reanude normalmente sus actividades a fin de
reactivar la economía, a pesar de que la pandemia está muy lejos de
estar bajo control en Estados Unidos.
¡LAS ESCUELAS DEBEN ABRIR EN OTOÑO!, tuiteó Trump el lunes, y ayer reiteró su desacuerdo con las medidas
muy duras y costosaspromovidas por los Centros de Control y Prevención de Enfermedades para reabrir las instituciones educativas.
Indicó que en varios países europeos, en los que la epidemia lleva más tiempo activa y ya alcanzó su pico,
las escuelas están abiertas sin problemas, y amenazó a los legisladores demócratas con cortarles los subsidios federales, pues los acusa de querer mantener cerradas los colegios por motivos políticos.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, eludió
ayer una pregunta sobre si la medida estaba diseñada para presionar a
las universidades a reabrir sus campus, diciendo que la política
habla por sí misma.
Si bien el gobierno quiere abrir la economía lo antes posible pese al
elevado nivel de contagios, ayer el Departamento de Seguridad Nacional y
el de Justicia propusieron dar atribuciones a las autoridades
fronterizas para negar el asilo a personas procedentes de países con
altas tasas de enfermedades contagiosas mortales, en lo que representa
la acción más reciente de una serie de regulaciones para elevar
drásticamente el estándar de quién califica para recibir protección
humanitaria. La propuesta, alegan, tiene como fin combatir la pandemia.
Foto Ap
Ap, Afp y Xinhua
Periódico La Jornada
No hay comentarios:
Publicar un comentario