El modelo “multistakeholderism” y el neoliberalismo
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Uno de los recientes fenómenos que llama la atención en el ámbito de
Internet, desde una perspectiva de la sociedad civil, es la aparición
repentina del "modelo multistakeholderism” -MS- ( modelode múltiples partes interesadas o modelo multisectorial) y su inserción, desde hace unos 2 o 3 años [1]
, en los debates sobre la gobernanza de Internet. El término, por
supuesto, existe de tiempos atrás e incluso se lo ha utilizado en
relación a Internet para describir (en forma más o menos adecuada) los
procesos de toma de decisiones de varios de sus órganos técnicos (IETF,
IAB, ICANN). [2]
Asociado a este hecho está el nuevo e insólito esfuerzo del gobierno de
EE.UU. –en todos los frentes y junto con sus aliados y acólitos
empresariales, técnicos y segmentos de la sociedad civil que participan
en las discusiones de la gobernanza de Internet–, para extender el uso
de las versiones del modelo MS. Esto es, a partir de que en ámbitos
locales y técnicos circunscritos ha logrado un grado considerable de
éxito, se apunta a que se convierta en la base fundamental, y
prácticamente única, sobre la cual se debe canalizar el tratamiento de
este tipo de debates sobre la gobernanza de Internet (según establece
el pronunciamiento del gobierno de EEUU sobre la transferencia de la
función de gestión del sistema de nombres de dominio -DNS- [3] ).
Cabe destacar también que el término "multisectorial" parece haber reemplazado a "libertad en Internet", como el meme [4]
movilizador de preferencia respecto a Internet (habida cuenta que
"libertad en Internet" se ha visto desacreditada, tras las revelaciones
de Snowden [5] , al ser asociada con la “libertad” del gobierno de EEUU de "vigilar", "sabotear" y "subvertir" a través de Internet).
En medio de estos acontecimientos se ha producido un desplazamiento
sutil en la presentación del modelo MS: si antes se lo hacía como marco
para los procesos de consulta de la gobernanza de Internet, ahora
aparece como el modelo necesario para la toma de decisiones para la
gobernanza de Internet. Por otra parte, se da por entendido que esta
toma de decisiones tendría lugar no sólo dentro de las áreas
relativamente circunscritas de la gestión técnica de las funciones de
Internet, sino también en las áreas más amplias del impacto de Internet
y de las políticas públicas asociadas, donde la importancia de Internet
es a la vez mundial y en rápida expansión.
Lo más llamativo es
que el multisectorialismo se presenta como el modelo que sustituiría a
los procesos “anticuados” de la toma de decisiones democráticas en
estas esferas; lo que, según algunos de sus defensores, proporcionaría
un modelo "posdemocrático mejorado" para la definición de políticas
mundiales en materia de Internet.
¿Qué es exactamente el "multistakeholderism"?
Esto no está del todo claro y nadie aún (mucho menos el Departamento de
Estado de EE.UU., que invoca el modelo 12 veces en su presentación de
una página para la reunión NetMundial en Brasil [6] ) ha proporcionado algo más que referencias en titulares al "modelo MS” o ejemplos de lo que podría parecer.
Sea lo que sea, un elemento clave es que las políticas (y otros
aspectos) serán decididas por y con la inclusión de todas las "partes
interesadas". Ellas evidentemente incluirán, por ejemplo, las
principales corporaciones empresariales de Internet, que podrán así
promover sus "intereses" y formular las políticas de Internet a través
de algún proceso de consenso donde todos los participantes estarán en
"igualdad" de condiciones, y donde las normas que rigen, por ejemplo,
los procedimientos operativos, conflictos de interés, los modos y
estructuras de gobernanza interna, normas de participación, etc. etc.
parecen inventarse sobre la marcha.
Es evidente que las
grandes corporaciones de Internet, el gobierno de EEUU y sus aliados en
las comunidades técnicas y en la sociedad civil están muy entusiastas;
elaborar conjuntamente cuestiones como los marcos relacionados a
Internet, los principios y normas (o no) para la privacidad y la
seguridad, los impuestos, los derechos de autor etc., es bastante
seductor. Lo que no está tan claro es si el resultado de alguna manera
contribuye al interés público más general, o promueve a Internet para
el bien común, o cualquier cosa que vaya más allá de un conjunto de
normas y prácticas diseñadas para promover los intereses y los
beneficios de quienes ya gozan de los mayores rendimientos gracias a su
actual "interés" en Internet.
Lo que aparece manifiesto, sin
embargo, es que el modelo MS que están presentando es de hecho la
transformación del modelo económico neoliberal, que ha provocado graves
estragos y tragedias humanas en todo el mundo, en una nueva forma de
gobernabilidad "posdemocrática". (Esta conexión entre el modelo
económico neoliberal y la gobernanza de múltiples partes interesadas se
presenta más claramente en un documento publicado por el Aspen
Institute, con numerosos coautores y colaboradores, estrellas de
Internet: “ Toward A Single Global Digital Economy ” [7] ( Hacia una economía global digital única
). El documento defiende, esboza y celebra el dominio sobre la economía
de Internet por parte de EEUU, las corporaciones estadounidenses y sus
aliados de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económicos –OCDE-, y proporciona un plan de acción para la
implementación del modelo MS como la estructura de gobernanza de
respaldo).
Así, por ejemplo, si bien existen oportunidades
claras y bien vistas para la participación de las partes interesadas
del sector privado, del sector técnico y de actores de la sociedad
civil en los foros sobre políticas de Internet (el mercado) no hay
nadie en el proceso (ninguna "parte interesada") con la tarea de
representar el "interés público". Por lo tanto, nadie tiene la
responsabilidad de asegurar que los procesos de toma de decisiones sean
justos y no contaminados y que la gama de participantes sea lo
suficientemente incluyente como para garantizar un resultado legítimo y
socialmente equitativo. En el modelo de múltiples partes, como en el
modelo económico neoliberal, tampoco existe un marco regulatorio
externo para proteger el interés general o público en medio de los
resultados derivados de las interacciones entre los intereses
sectoriales particulares.
¿Y el interés público?
Mientras que en un proceso democrático normal (o un mercado no
"liberalizado") el marco y las expectativas de participación
subyacentes serían que los actores persigan el "interés público" (con
diferentes interpretaciones de lo que eso podría significar, por
supuesto) y que existiría algún tipo de contrato social básico para
proporcionar una "red de seguridad social" para todos los individuos y
grupos, y en particular los menos capaces de defender sus propios
intereses, en el modelo MS no hay promoción del interés público. De
alguna manera el interés público más bien sería un resultado o efecto
colateral (mágico) de los procesos de confluencia (o consenso) de cada
parte individual actuando en búsqueda de su interés particular. Los
gobiernos pueden o no ser una parte (igual) interesada de este modelo,
pero de todos modos, la intención general es, en lo posible, descartar
por completo al gobierno (incluso en su rol de protector de los
derechos y garante de procesos y resultados equitativos).
Sin
duda esto representa una "privatización" total de la gobernanza, cuando
por ejemplo, las grandes empresas de Internet tienen igualdad de
derechos en la determinación de asuntos de gobernanza de Internet en
áreas como la regulación (cuando tal cosa se permita), junto con las
otras partes interesadas. En este modelo, no existe un espacio para
Internet como un bien común, ni como un espacio o recurso disponible en
forma igual para todos y todas en tanto herramienta para el
mejoramiento económico y social general (por ejemplo, para los
marginados, los pobres, la población de los países en desarrollo e
incluso quienes no son actualmente "usuarios/as" de Internet). Las
"partes interesadas" pueden inventar e incluso hacer cumplir las
normas, y cualquiera que no es o no puede ser una "parte interesada":
pues, qué pena.
Asimismo, hay una negativa a aceptar incluso
la posibilidad de un marco regulatorio para Internet (fue el argumento
expresado con mayor vehemencia en el transcurso de la campaña Libertad
en Internet), o de admitir que Internet tendría tal importancia como
plataforma fundamental para la acción humana en el presente período,
que ya no puede ser vista como un dominio de acción y control
únicamente privatizado.
Los efectos dañinos del
neoliberalismo son muy bien conocidos. Estos se han hecho evidentes a
través de su impulso a la privatización de servicios públicos como la
educación y los cuidados de la salud en los países en desarrollo (y los
desarrollados), con los consiguientes aumentos significativos en la no
- escolarización y el deterioro de la salud entre la población pobre,
marginada y rural; el debilitamiento del contrato social y de las redes
de protección social en los países desarrollados, con los aumentos
asociados de la pobreza infantil, la falta de vivienda y el hambre; el
"Consenso de Washington" y los regímenes de austeridad impuestos desde
el exterior, de los que muchos países en todo el mundo se están recién
ahora recuperando (y que el propio Fondo Monetario Internacional -FMI-
ha reconocido como un error grave y altamente destructivo); las
acciones del FMI y del Banco Mundial para insistir en la privatización
y la desregulación y así diezmar a numerosas empresas locales a favor
de las multinacionales; y en general, al dar el impulso (y modelo)
ideológico para un ataque social y económico significativo a nivel
mundial contra los sectores empobrecidos y vulnerables.
Este
es el modo de gobernanza que a través del modelo MS (su contraparte en
la gobernanza mundial de Internet y más allá) está destinado a ser el
modelo básico de gobierno para Internet, promovido –nada sorprendente–
por el sector empresarial y el gobierno de EEUU, pero también –y eso sí
es asombroso– por amplios elementos de la sociedad civil, como también
de la comunidad técnica.
El verdadero significado y objetivo
final de esta neoliberalización de la gobernanza es, por supuesto, no
respecto a las cuestiones técnicas circunscritas de la gobernanza de
Internet, sino más bien a cuestiones como la fiscalización del comercio
habilitado por Internet y en última instancia, la necesidad de
compartir los ingresos provenientes de la actividad económica
relacionada con Internet, en un mundo donde la desigualdad de ingresos
está creciendo a un ritmo sin precedentes sobre una plataforma de
Internet y de la digitalización global.
Con la cancha inclinada
El contexto actual, donde los gigantes mundiales de Internet, como
Google o Amazon tienen total libertad para transferir/asignar ingresos
y costos a cualquier lugar que elijan dentro de sus imperios
multinacionales, con el fin de reducir al mínimo las cargasfiscales,
está llegando rápidamente a un punto crítico, en el que algún tipo de
intervención es probable. En un horizonte más lejano, la importancia de
la polarización de ingresos a escala nacional e internacional –en gran
parte vinculada de alguna manera con la tecnología digital e Internet–
necesitará en algún momento de intervención y reequilibrio, si se
quiere evitar la protesta social.
Podemos suponer que, en un
régimen de gobernanza de múltiples partes interesadas, los gigantes de
Internet como Google o Amazon serán socios (partes interesadas) iguales
en la determinación de asuntos de regulación de Internet, impuestos y
la posible asignación/reasignación de beneficios generales, es decir,
aquellos aspectos que sean de preocupación financiera directa para
ellos y sus accionistas/propietarios. Y estas resoluciones se llevarán
a cabo en contextos políticos donde no haya defensores/partes
interesadas evidentes que representen el interés público general
global. Obviamente no es coincidencia que tal arreglo favorece
directamente a EE.UU. y a otros intereses de los países desarrollados y
a los intereses de las empresas dominantes de Internet, es decir,
aquellos que cabildean más activamente a favor del modelo de múltiples
partes interesadas.
Por lo mismo, es indudable que los países
en desarrollo estarán en clara desventaja. Sus gobiernos carecen de los
conocimientos y, a menudo, los recursos para actuar como partes
interesadas eficaces en los procesos de MS. Sus empresas nacionales de
Internet o son subunidades de las corporaciones globales o son
demasiado débiles para ser eficaces en este tipo de entornos; es más,
muchas de sus organizaciones de la sociedad civil han sido cooptadas
por medio de dádivas como los viajes internacionales, el halago de la
"participación" en discusiones con estrellas de Internet, junto con las
migajas de los beneficios organizacionales locales. Los ciudadanos de
estos países (junto con las poblaciones desposeídas en los países
desarrollados) estarán completamente a merced de las elites de los
países desarrollados y aquellas de esos pequeños segmentos de sus
propios países que ya han alcanzado el éxito en el ámbito mundial de
Internet, pudiendo beneficiarse enormemente en términos de prestigio y
de otras maneras, mediante el dominio sobre los procesos de gobernanza
de múltiples partes interesadas.
(Traducción ALAI).
- Michael Gurstein , canadiense, es Director Executivo del Centre for Community Informatics Research, Development and Training . Una versión previa de este artículo se publicó en inglés en: http://gurstein.wordpress.com .
* Artículo publicado en América Latina en Movimiento, No. 494 (abril 2014) titulado “Internet, poder y democracia”. http://www.alainet.org/publica/494.phtml
[1] http://gurstein.wordpress.com/2012/12/09/whose-hand-off-what-internet-some-reflections-on-wcit-2012/
[2] IETF: Grupo de trabajo de ingeniería en Internet. IAB: Consejo de Arquitectura de Internet. ICANN: Corporación de Internet para la Asignación de Nombres y Números. (Todas siglas del inglés).
[3] http://www.ntia.doc.gov/press-release/2014/ntia-announces-intent-transition-key-internet-domain-name-functions
[4] NdE: Un meme (o mem) es, en las teorías sobre la difusión cultural, la unidad teórica de información cultural transmisible de un individuo a otro, o de una mente a otra, o de una generación a la siguiente. (Wikipedia)
[5] http://gurstein.wordpress.com/2013/09/24/internet-freedom-and-post-snowden-global-internet-governance/
[6] http://www.state.gov/e/eb/rls/prsrl/2014/221946.htm
[7] http://www.aspeninstitute.org/sites/default/files/content/upload/Toward_a_Single_Global_Digital_Economy_Aspen_IDEA_Project_0.pdf
http://www.alainet.org/active/72969
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