Por Javier Rodriguez Roque
Asunción, 19 mar (PL) El gobierno paraguayo creó una Comisión de Crisis para enfrentar la adhesión generalizada al llamado a huelga general hecho por seis centrales sindicales y apoyado por numerosas organizaciones sociales y políticas.
El paro, señalado para el próximo 26 de marzo y precedido por dos días de movilizaciones departamentales incluyendo a esta capital, recibió en las ultimas horas respaldos fundamentales de importantes sectores de la producción y los servicios.
Los sindicatos del transporte decidieron participar de la huelga paralizando el servicio, al igual que las organizaciones sindicales que agrupan a los trabajadores de las telecomunicaciones y electricidad.
A ellos se unieron ya todos los sindicatos del área de educación con más de 42 mil miembros, lo cual confirmó oficialmente que no habrá clases a ningún nivel en las escuelas públicas del país.
Otras adhesiones fueron las de los trabajadores aeroportuarios y la casi totalidad del sector médico, aunque se mantendrán guardias en los hospitales y policlínicos.
El Sindicato de Periodistas de Paraguay decidió también adherir a la huelga utilizando dos variantes pues en algunos casos paralizarán totalmente sus actividades y en otros realizarán solamente la cobertura de las actividades realizadas durante el paro.
Paralelamente, la Federación Nacional Campesina y otras organizaciones que agrupan a los labriegos realizarán una movilización nacional hacia Asunción en reclamo del cese de la represión al campesinado y demandando la recuperación de las tierras usurpadas.
Finalmente, las agrupaciones estudiantiles anunciaron su participación en la protesta que tiene como objetivo general el rechazo a la política económica y social del actual Ejecutivo.
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