Por Raimundo López
San Salvador, 27 abr (PL) El Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) de Honduras rechazó en El Salvador el retorno de ese país a la OEA mientras no se haya restaurado el orden constitucional en esa nación.
No se puede aceptar un país que vive un régimen de facto producto de un golpe de estado, afirmó el subcoordinador general del FNRP, Juan Barahona, en declaraciones a Prensa Latina en esta capital.
Barahona explicó que el régimen de Porfirio Lobo busca ser readmitido en la Organización de Estados Americanos (OEA) en su Asamblea General programada para comienzos de junio próximo en San Salvador.
Precisó que con ese reconocimiento, el gobierno busca el reinicio de los desembolsos de los organismos financieros internacionales, congelados tras el golpe militar que depuso al presidente Manuel Zelaya el 28 de junio de 2009.
Además de la crisis política, Honduras tiene una económica muy profunda y el estado no tiene ni siquiera para pagar a los empleados públicos, a los maestros, dijo.
Señaló que actualmente está en curso una mediación iniciada el 9 de abril pasado por los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y de Colombia, Juan Manuel Santos, "con el cabeza del régimen, Porfirio Lobo Sosa".
Agregó que el 16 de abril último sostuvieron con Chávez una reunión en la cual participaron Zelaya, coordinador general del Frente, Barahona y otros dirigentes de esa organización, fundada horas después del golpe.
Indicó que se trata de una gestión que busca "cómo volver al orden constituci8onal en Honduras" y ante la cual el FNRP presentó cuatro demandas, que fueron comunicadas telefónicamente a Lobo Sosa, quien las aceptó.
Las condicionantes del Frente son el retorno de los exiliados, entre ellos Zelaya, el respeto a los derechos humanos y la convocatoria a una asamblea nacional constituyente.
El cuarto punto es el reconocimiento del Frente como una organización política con facultades para participar en procesos electorales, cuando se haya recuperado el orden democrático y bajo una nueva constitución.
Si la mediación fracasa, no llega a ningún resultado, nuestra posición y petición a los países que integran la OEA es que a Honduras no se le puede apoyar para que reingrese, manifestó Barahona.
La aceptación sería dejar todo el golpe de estado impune, borrón y cuenta nueva, y aceptar que en cualquier otro país puede darse un golpe de estado sabiendo que no habrá ninguna consecuencia, advirtió.
Recordó que en Honduras se mantienen en pie todas las estructuras del golpismo y un régimen de intolerancia e irrespeto a los derechos humanos, que reprime cruelmente cualquier expresión de rechazo de la población.
Barahona y el dirigente del Frente Gilberto Ríos concluyeron anoche una visita de dos días a El Salvador, donde -informaron- se reunieron con el canciller Hugo Martínez y la dirigencia del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
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