Después
de una concentración realizada en la autopista Francisco Fajardo de
Caracas, la autodenominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD) anunció
que el próximo jueves 3 de noviembre convocará a una marcha hasta el
Palacio de Miraflores para exigirle al presidente de la República,
Nicolás Maduro, que entregue su mandato constitucional.
La movilización opositora ocurrió un día después que la mayoría de derecha en la Asamblea nacional aprobara un acuerdo que pretende iniciar un "juicio político" a Maduro, un recurso que no está incluido en la Constitución del país.
Destitución del mandatarioEl
único mecanismo de destitución del mandatario permitido por la Carta
Magna es un antejuicio de mérito que requiere el aval del Poder Moral —
órgano integrado por el Defensor del Pueblo, el Fiscal General y el
Contralor General— y el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
Para el gobierno actual, la maniobra de un 'impeachment' a Maduro es un intento de golpe de Estado porque la Asamblea no tiene poder para ejecutar esa acción de manera unilateral, además de haber desconocido al Poder Judicial.
El diputado de derecha explicó que una vez declarado el abandono del cargo, será convocada una marcha hasta el palacio presidencial para exigirle al mandatario nacional el acatamiento de dicha declaración.
Por si fuera poco, los líderes de la protesta llamaron a sus seguidores a realizar un paro nacional el 28 de octubre. Ante esos llamados, el vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, advirtió que "la clase obrera y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana tomarán las empresas que se paralicen".
Compromiso fallido
Anteriormente, con el deseo de salir de la crisis política, el presidente Maduro invitó personalmente al parlamentario de derecha y presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, al palacio de Miraflores para la conformación del Consejo de Defensa de la Nación.
"He
convocado este Consejo de Defensa de la Nación, tal como lo establece
la Constitución (…) para regular de manera democrática en paz todo el
desarrollo de la vida política, institucional, social, económica de la
República", señaló entonces Maduro.Sin embargo, el presidente de
la Asamblea Nacional decidió no asistir, asegurando que no tenía
intención de "hacer el papel de tonto". "Lamento mucho que el presidente
de la Asamblea Nacional continúe en desacato a la Constitución y no
quiera dialogar, impulsando el verbo de la intolerancia", sostuvo
entonces Maduro.
Fractura de la derecha
La posibilidad de resolver la crisis mediante el dialogo, han evidenciado la fractura de la derecha venezolana. Mientras que el secretario de la MUD, Jesús 'Chúo' Torrealba, anunciaba que la oposición participaría en los diálogos con el Gobierno, la fracción Acción Democrática de Ramos Allup aseguró que no estaba al tanto de esa decisión sino que se enteró "por la televisión".
A su vez, el grupo de extrema derecha liderado por Leopoldo López —coordinador del Movimiento Voluntad Popular— rechazó cualquier acercamiento con el Gobierno.
La movilización opositora ocurrió un día después que la mayoría de derecha en la Asamblea nacional aprobara un acuerdo que pretende iniciar un "juicio político" a Maduro, un recurso que no está incluido en la Constitución del país.
Para el gobierno actual, la maniobra de un 'impeachment' a Maduro es un intento de golpe de Estado porque la Asamblea no tiene poder para ejecutar esa acción de manera unilateral, además de haber desconocido al Poder Judicial.
"Hay que llamarlos a la
sindéresis, a que defiendan sus ideas en el ámbito político sin pasarle
por encima a la Constitución. No es a través del fraude y de la fuerza
que se van a imponer las cosas en Venezuela", apuntó el diputado socialista Héctor Rodríguez.
Otra forma con la que la oposición intentaría destituir al presidente electo del poder, sería el recurso del abandono del cargo.
"Yo
sé que todos estamos desesperados, pero tenemos que utilizar el último
recurso que nos queda: declarar desde la Asamblea Nacional el abandono
del cargo de Nicolás Maduro", declaró el diputado derechista Freddy Guevara.
Durante
la concentración convocada por la alianza opositora, el secretario
general de Acción Democrática, Henry Ramos, instó a sus seguidores a
exigirle a la Asamblea Nacional (AN) que en sus próximas sesiones
declare al presidente Maduro en abandono del cargo con el fin de lograr
su destitución.El diputado de derecha explicó que una vez declarado el abandono del cargo, será convocada una marcha hasta el palacio presidencial para exigirle al mandatario nacional el acatamiento de dicha declaración.
©
REUTERS/ Carlos Eduardo Ramirez
Este
recurso está abalado por la Constitución y podría ser adoptado una vez
tenga lugar un abandono "público y notorio" del máximo mandatario o
cuando esté ausente en el país pos más de cinco días sin notificar al
Parlamento. Sin embargo, Nicolás Maduro no tiene intención de abandonar
su cargo, permanece en Venezuela y ejerce plenamente sus funciones como
Presidente.
Paro nacionalPor si fuera poco, los líderes de la protesta llamaron a sus seguidores a realizar un paro nacional el 28 de octubre. Ante esos llamados, el vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, advirtió que "la clase obrera y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana tomarán las empresas que se paralicen".
"Empresa que se pare,
empresa tomada por los trabajadores y por el pueblo; no hay vuelta atrás
de nada, instrucción del presidente Nicolás Maduro: empresa que se
pare, empresa tomada por los trabajadores y la Fuerza Armada", resaltó Cabello.
El
también diputado a la Asamblea Nacional repudió el irrespeto que
manifiesta la derecha hacia las instituciones del Estado, al desacatar
las medidas tomadas por el Tribunal Supremo de Justicia, así como
desconocer al Ejecutivo, y a los demás Poderes Públicos.Compromiso fallido
Anteriormente, con el deseo de salir de la crisis política, el presidente Maduro invitó personalmente al parlamentario de derecha y presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, al palacio de Miraflores para la conformación del Consejo de Defensa de la Nación.
Fractura de la derecha
La posibilidad de resolver la crisis mediante el dialogo, han evidenciado la fractura de la derecha venezolana. Mientras que el secretario de la MUD, Jesús 'Chúo' Torrealba, anunciaba que la oposición participaría en los diálogos con el Gobierno, la fracción Acción Democrática de Ramos Allup aseguró que no estaba al tanto de esa decisión sino que se enteró "por la televisión".
A su vez, el grupo de extrema derecha liderado por Leopoldo López —coordinador del Movimiento Voluntad Popular— rechazó cualquier acercamiento con el Gobierno.
"No
es la primera vez que esto pasa. Esas contradicciones están marcadas
por las distintas visiones dentro de la derecha, unos quieren salidas
violentas, otros quieren negociar, y en medio de esas pugnas están los
deseos de quienes sueñan con ser candidatos presidenciales", destacó al respecto Héctor Rodríguez, Jefe de la Bancada del PSUV en la Asamblea Nacional.
"El problema es que las divisiones internas de la oposición ponen en riesgo la estabilidad del país", agregó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario