Estudiantes de enseñanza media y universitaria se manifestaron en
las últimas horas en Chile, enardecidos por el asesinato de dos jóvenes
el pasado día 14 en Valparaíso durante el transcurso de una protesta.
Los manifestantes tomaron las calles y provocaron un caos vehicular
en la céntrica Alameda Bernardo O’Higgins de la capital, donde
posteriormente se produjeron cargas policiales contra los presentes.
Este mismo jueves por la mañana, otro grupo de jóvenes invadió la
entrada del antiguo Congreso Nacional en Santiago, con carteles y
consignas en contra de los políticos a quienes les exigían la renuncia.
Igualmente, también jóvenes protagonizaron una protesta ante la sede
de la alcaldía de la principal urbe chilena, mientras en Valparaíso se
organizaban otras asociaciones con objetivos similares.
El caldeado ambiente tiene lugar a menos de 24 horas de la Cuenta
Pública que rendirá mañana en Valparaíso, a 120 kilómetros de esta
capital, la presidenta chilena Michelle Bachelet.
Se trata de un acto formal ante el Congreso Nacional que se efectúa
cada año desde 1924, en el que la mandataria hará un balance de su
gestión y proyectará su programa en medio de una crisis de credibilidad
de los políticos.
Bachelet emprendió una cruzada anticorrupción con una amplia gama de
iniciativas para deslindar los negocios de la política, además de un
cambio sustancial en su gabinete ministerial.
Sin embargo, su plan de reformas, en especial la referida a la
educación, encuentra detractores en el seno de los maestros y los
estudiantes, decididos a seguir la batalla en las calles.
Para colmo, el asesinato de Exequiel Borvarán (18 años) y Diego
Guzmán (25), tras un altercado en una casa en Valparaíso, complicó aún
más el panorama, si bien la propia jefa de Estado condenó enérgicamente
semejante incidente.
Borvarán y Guzmán fueron baleados supuestamente por otro joven,
cuando intentaban colocar carteles en una vivienda al cierre de una
marcha el jueves de la semana anterior.
Los velatorios y sepultura de Borvarán y Guzmán se desarrollaron el
pasado fin de semana bajo un ambiente de profunda tristeza e ira, con
amplia presencia de jóvenes.
PL
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