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jueves, 13 de octubre de 2011

A un año del rescate los 33 mineros chilenos intentan salir de la pobreza


La Radio del Sur/TeleSur

(Foto: Archivo)

Los 33 mineros chilenos que permanecieron 70 días atrapados en la mina San José, en el norte de la nación austral, conmemoran este jueves el primer aniversario de su rescate con una misa en la entrada del yacimiento, entre otras actividades. Actualmente, los trabajadores se esfuerzan por rehacer sus vidas y enfrentar las penurias económicas.
“Tengo mucho miedo de regresar allá abajo (a la mina)”, manifestó Carlos Mamani, uno de los trabajadores que permanecieron más de dos meses a 700 metros bajo tierra en la mina San José, en Copiapó, a unos 850 kilómetros al norte de Santiago, en el desierto de Atacama.
“Tengo muchas pesadillas, malos sueños. No se saldrán de mi cabeza. Se quedaron ahí para siempre”, agregó el minero.
Los 33 mineros, víctimas de las malas condiciones laborales, conmemorarán el primer aniversario de su rescate pensando una salida a la situación de pobreza y depresión que afecta a varios de ellos.
“Los 33 estamos en lo mismo, sin trabajo”, se lamentó Mamani, el único extranjero del grupo atrapado. Nació en Bolivia, pero prefirió quedarse en Chile pese a las ofertas hechas por el presidente boliviano, Evo Morales.
“Algunos se mantienen dando charlas para motivar a la gente y otros estamos esperando las oportunidades”, pues después de que fueron dados de alta y participado en los medios de comunicación, vencieron las licencias médicas y el salario también.
El minero Luiz Urzúa se dedica a dictar charlas para contar su experiencia. Mientras que el menor del grupo, Jimmy Sánchez, de 20 años, informó que se encontraba más tranquilo adentro de la mina, pues ahora está sin empleo y “asumiendo todo lo que me pasó”.
“Adentro estaba más tranquilo. Ahora estoy raro. He cambiado, no soy el mismo de antes. Antes era más alegre, salía siempre, me gustaba conversar. Ahora no salgo, me siento solo”, relató.
Después del derrumbe en la mina, en un principio, se creyó que no había sobrevivientes, sin embargo, una nota que rezaba “estamos bien los 33″ devolvió las esperanzas al pueblo chileno el 26 de septiembre del año pasado. El desplome ocurrió el 5 de agosto de 2010.
A pocos días de conocerse la tragedia, el presidente de la nación, Sebastián Piñera, anunció que su gobierno realizaría una completa revisión y reformulación de las condiciones laborales en Chile, sin embargo, hasta ahora los trabajadores no han visto resultados.

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