En
Colombia, la Defensoría del Pueblo, tras un mes de seguimiento, ha
confirmado este martes que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de
Colombia (FARC) han cumplido la tregua unilateral e indefinida entrada
en vigor el pasado 20 de diciembre.
"En este lapso no se han registrado acciones armadas ofensivas de las FARC que puedan ser consideradas como un incumplimiento o violación del cese el fuego", ha afirmado el citado organismo mediante un comunicado.
Las FARC también han asegurado esta misma jornada que desde el momento en que entrara en vigor el cese el fuego unilateral, no han violado la tregua, aunque, según sus declaraciones, varias veces el Ejército colombiano ha intentado sabotearlo.
"Un mes de cese el fuego. Hemos cumplido a pesar del sabotaje del Ejército que nos ha causado muertes en asaltos y bombardeos", ha subrayado Félix Antonio Muñoz, alias Pastor Alape, uno de los negociadores de las FARC en los diálogos de paz.
Aunque las FARC aseguran que han cumplido con la tregua y la Defensoría del Pueblo ha aprobado esta alegación de la guerrilla, en su informe ha destacado algunos hechos violentos ocurridos en las zonas de influencia de las FARC.
“Estos hechos ocurrieron en zonas donde hay presencia de las FARC, sin que se haya podido comprobar la participación de ese grupo armado ilegal", reza texto del organismo.
El pasado 17 de diciembre las FARC anunciaron un cese el fuego unilateral e indefinido, que entró en vigor el 20 de diciembre de 2014. Sin embargo, la guerrilla ha pedido en repetidas ocasiones al Gobierno de Colombia que se sume a su iniciativa.
Al respecto, el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, ha respondido que un alto el fuego bilateral y definitivo con las FARC dependerá de los consensos que se logren respecto a los puntos de la agenda de paz que queden por ser abordados.
El Gobierno de Santos y las FARC volverán a la mesa de negociaciones, interrumpidas por las fiestas de fin de año, el lunes 2 de febrero.
En esta ronda de conversaciones se definirán los detalles de los últimos dos puntos restantes de la agenda, es decir, las víctimas y el fin del conflicto.
Desde que comenzaran las conversaciones en noviembre de 2012, el Gobierno colombiano y las FARC han alcanzado preacuerdos en tres de los cinco puntos de la agenda negociadora, referidos a tierras, participación política, y drogas y cultivos ilícitos.
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