Con la bendición de los pueblos indígenas, este miércoles comenzaron
los actos por la toma de posesión del presidente de Bolivia, Evo
Morales, para un nuevo periodo presidencial que se extenderá hasta 2020.
En horas de la mañana, Morales llegó a la ciudad arqueológica de
Tiwanaku, lugar sagrado para las culturas andinas, ubicado en el
altiplano boliviano en la margen oriental del río Tiwanaku, donde,
rodeado del pueblo boliviano e invitados internacionales, fue investido
como guía espiritual y líder político indígena.
La ceremonia comenzó con una limpieza al líder boliviano, para
protegerlo a él y al Gobierno de las malas energías, portadoras de
desequilibrio en todas las dimensiones.
Luego, los amautas (sabios) lo vistieron con una túnica andina,
hecha con lana de vicuña y tejida a mano. El traje tiene dos franjas
verticales a ambos lados que representan a columnas de amautas que lo
acompañarán en su camino, mientras que en el centro está la pechera
repujada en oro que simboliza el rostro del Tata Inti o dios Sol.
“Quiero empezar diciendo que hoy es un día especial, un día
histórico de reafirmación de nuestra identidad, de reafirmación de
nuestra revolución democrática cultural”, expresó Morales durante la
ceremonia tuvo su sede entre la pirámide de Akapana y el templo de
Kalasasaya a donde el mandatario fue escoltado por más de medio millar
de Ponchos Rojos, considerados su guardia indígena.
Morales apuntó que en Bolivia se están viviendo tiempos de retorno
del equilibrio y de la igualdad, con políticas de complementariedad y
solidaridad en un proceso de cambio, y que solo se necesita consolidar
la revolución desde los puntos de vista educativo, cultural, de salud,
productivo, de justicia, de trabajo y de pensamiento.
Morales señaló que a pesar de tanto sufrimiento y de tanta masacre,
los pueblos originarios nunca se dieron por vencidos y mantuvieron la
fe en que el equilibrio retornaría.
“No pudieron hacernos desaparecer, aquí estamos para gobernar
nosotros mismos, haciendo respetar nuestra Pachamama, despertar la
energía comunal (…) Ahora no solamente somos millones socialmente,
culturalmente, sino que también somos millones electoralmente, muchas
gracias hermanos y hermanos de Bolivia”, agregó el dignatario, quien
fue reelecto para un nuevo mandato el pasado octubre con 61,02 % de los
votos.
Por el cambio
Consideró que la región latinoamericana se encuentra en un “gran
parto” de esperanza, unidad, armonía y felicidad, luego de que durante
más de 500 años imperara el odio,el racismo, la discriminación y el
individualismo, “desde que llegaron los hombres extraños que nos
dijeron que había que modernizarse y civilizarse”.
“Nos enseñaron su filosofía de muerte, pero para modernizarnos y
civilizarnos primero tenían que desaparecer a los pueblos indígenas del
mundo, nuestro idioma, cultura, raíces, nuestra hoja de coca, nuestros
productos, símbolos, música y nuestra vestimenta, querían acabar con
nuestra identidad”, dijo, pero recalcó que hubo un despertar y los
cambios están dando resultados.
Asimismo, abogó por un cambio a nivel mundial. “Necesitamos cambiar
toda la escala nacional, internacional e intercontinental, todo esto en
base a principios fundamentales como nuestra identidad, nuestra
convivencia, solidaridad y complementariedad en consenso y en
equilibrio que son las bases de la cosmovisión de los pueblos indígenas
del continente y del mundo”, sostuvo.
Agregó que “tenemos la obligación de defender la vida, de salvar el
planeta Tierra y acabar con el capitalismo y el imperialismo”.
Advirtió que “los países industrailizados están sobreindustrializando y eso tiene un costo para el plantea Tierra”.
Enfatizó que no hay primero, segundo, tercero ni cuarto mundo, sino
uno solo, “y todos somos responsables de este solo mundo. No se trata
de un problema de colores, lo que te va a matar es el color del agua
que tomas, lo que te va a matar es el olor del aire que respiras. Somos
miles de colores pero un solo planeta. Por eso, hermanas y hermanos,
que la Pachamama nos ilumine, que nuestros astros nos guíen en este
camino de construcción de una vida diferente con derechos iguales a una
vida plena de felicidad, de armonía, de paz, de hermandad”.
Morales comenzó a gobernar a Bolivia en 2006, luego de resultar
electo en 2005. Durante su primer mandato impulsó una constituyente que
generó una nueva Constitución, texto que entró en vigencia en 2009. Ese
año el Presidente fue electo bajo la nueva Carta Magna y el Estado
Plurinacional de Bolivia. En octubre de 2014, fue reelecto para un
nuevo mandato.
Este jueves, en la Asamblea Plurinacional, ubicada en La Paz, se
llevará a cabo la juramentación del Mandatario, con la presencia de
delegaciones de más de 40 países.
AVN
No hay comentarios:
Publicar un comentario