Adital
Por
César Sención Villalona
Desde
que ARENA perdió las elecciones presidenciales de 2009, los dirigentes de ese
partido, los directivos de la ANEP y algunos medios de comunicación de derecha
se han dedicado a crear nubarrones económicos para que la población rechace a
los gobiernos del FMLN. Durante el mandato del ex presidente Mauricio Funes
vaticinaron un derrumbe económico que nunca llegó. Y hoy andan diciendo lo
mismo.
San Salvador.
La evolución de la economía en los gobiernos del FMLN desmiente los pronósticos de ARENA, de la ANEP y de la prensa de derecha. Después de la caída del PIB en-3.1% en 2009, cuando ARENA gobernaba, la actividad económica creció 1.8% promedio en los años 2010-2013. En 2014 aumentó 2% y en 2015 crecerá casi 3%.
Los
datos sobre el empleo también son elocuentes. Entre 2008 y 2009 se perdieron
42,000 puestos de trabajo y desde entonces se han generado 145,000 empleos, o
sea, un poco más de 2,000 por mes. Esa cifra casi duplica los 800 empleos
mensuales creados en las últimas dos gestiones de ARENA, antes del derrumbe de
2008-2009.
Pero
los datos de producción y empleo nada le dicen a los directivos de la ANEP ni a
la dirigencia de ARENA, que prometieron maravillas cuando dolarizaron la
economía y acordaron los TLC con México y Estados Unidos. Ellos no revisan su
pasado ni quieren ver el presente.
En una
declaraciones publicadas en el Diario El Mundo, del 26 de abril de 2001, cuando
entraba en vigencia el TLC con México, el entonces ministro de economía, Miguel
Lacayo, decía que "todo el que quiera trabajar va a tener trabajo, la gente va
a tener mejores sueldos, vamos a vivir todos una vida digna”. No hay dudas de
que Lacayo vive bien, pero cuando su partido perdió el Órgano Ejecutivo dejó en
la pobreza al 40% de los hogares.
Declaraciones
tan asombrosas como la de Lacayo eran frecuentes en los altos funcionarios de
ARENA. El propio ex presidente Francisco Flores prometió 100,000 empleos
durante el primer año del TLC con Estados Unidos. Y aunque esas promesas eran
fantásticas, los directivos de la ANEP no mostraban reacciones críticas y se
sentían a gusto con los gobiernos de ARENA.
Hoy la
situación es distinta, pues como el gobierno del FMLN no está al servicio de la
cúpula empresarial, los dirigentes de la ANEP actúan como activistas políticos
de ARENA. Ellos tienen derecho a pertenecer al partido de su preferencia, pero
en el análisis económico no valen las manipulaciones estadísticas.
Los
detractores del gobierno no quieren reconocer que la economía sigue creciendo,
a tasas lentas pero positivas, que no hay retroceso, que se han generado más
empleos, que la inflación está controlada (-0.3% hasta abril) y que las demás
variables económicas están mejores que en 2009. Los datos contradicen a los
juicios malintencionados
El país
tiene problemas económicos que resolver. Eso es así en el mundo entero. Pero
con respecto al año 2009, la economía muestra un innegable avance. Además, se
están creando bases importantes para un mayor despegue de la actividad
productiva. Algunas de esas bases son el cambio en la matriz energética y la
mayor inversión social y en infraestructura.
La
economía durante el primer año del gobierno
Durante
el primer año del actual gobierno, la economía mejoró su nivel de crecimiento.
En 2014 el PIB aumentó 2% y en 2015 aumentará 2.5%, la mayor tasa de los
últimos ocho años. Uno de los sectores más dinámico es el agropecuario, que si
no es muy afectado por la sequía podría aumentar más de 3%. También crecen el
sistema financiero, el comercio y la industria textil y de alimentos.
El crecimiento
económico de 2014 fue estimulado por la demanda interna, pues ese año las
exportaciones disminuyeron -3% debido a los problemas de la economía de Estados
Unidos, principal mercado de exportación. En 2015 sigue creciendo la producción
para el mercado interno y se han reactivado las exportaciones, las cuales
aumentaron 10.8% entre enero y marzo.
La
producción para el mercado nacional es estimulada por el mayor consumo de la
población. Los siguientes datos lo demuestran: aumento de 12,496 plazas de
trabajo entre febrero de 2014 y 2015, aumento de 4% en el salario mínimo en
2014 y 2015 (mayor a la inflación de 0.5% en 2014 y -0.3% entre enero y abril
de 2015) y aumento del crédito a los hogares en 7.2% hasta febrero de este año.
La mayor demanda interna no se está cubriendo con compras externas sino con
producción local, pues las importaciones de bienes de consumo se estancaron en
2014 y cayeron -4.8% entre enero y marzo de 2015.
Las
finanzas públicas, si bien se mantienen deficitarias, han mejorado, pues el
déficit fiscal pasó de 5.7% del PIB en 2009 a menos de 4% en 2014. Este año
podría ser menor, pues la recaudación tributaria, que el año pasado se estancó,
está creciendo más de 7%. La deuda pública está en 59% del PIB. En 2009 era de
54%. El cambio no es drástico y el nivel alcanzado no es inmanejable. Y si no
fuera por el financiamiento de las pensiones sería mucho menor.
La
política del gobierno crea condiciones para el despegue de la producción y
debería contar con el apoyo de la iniciativa privada. Los ejes principales de
la transformación económica son la producción de bienes y servicios básicos, el
cambio de la matriz energética, para generar más energía limpia y reducir la
dependencia de la producción térmica, la mayor inversión social y en
infraestructura y la apertura de nuevos mercados internacionales.
Fuente: El Siglo XXI
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