(Foto: Archivo)
“No quisiéramos que se empiece a sembrar la impunidad respecto a la pérdida de vida de nuestros sindicales”, exclamó Figueroa en entrevista con ADN Radio.
La líder gremial consideró insuficiente lo que se ha dicho hasta ahora sobre el deceso de Juan Pablo Jiménez, muerto el jueves último en su local de trabajo en la empresa de ingeniería eléctrica Azeta, donde presidía el sindicato número uno.
Es necesaria “una investigación profunda y rigurosa que garantice que vamos a poder llegar hasta el final de las consecuencias y de la realidad de aquello que ocurrió”, enfatizó Figueroa, inconforme con la teoría policial de que Jiménez murió por una bala perdida que casualmente le impactó.
La presidenta de la CUT recordó que el dirigente gremial estaba llevando a cabo una negociación con la empresa en defensa de los derechos de los trabajadores y había denunciado malas prácticas antisindicales.
“Estos elementos, dijo, que hay que considerarlos a la hora de poder llevar una investigación lo más profunda y prolija respecto de la situación, el contexto en que se da”.
Figueroa insistió en la gravedad que tiene para el país el hecho de que un dirigente sindical muera de esa forma.
“Este no es un tema solo de la CUT, todos los trabajadores de Chile estamos de luto (…) no quisiéramos que en el caso de Chile se empiece a sembrar la impunidad respecto a la pérdida de vida de nuestros sindicales”, subrayó.
La líder de la CUT dijo esperar que hoy o mañana el Fiscal Nacional pueda recibir dirigentes de la organización, interesados en que se designe un fiscal especial para investigar la causa.
Jiménez fue sepultado el sábado, en un funeral al que asistieron decenas de compañeros de trabajo, amigos y familiares.
“Justicia, verdad, no a la impunidad” fue la consigna de los acompañantes del féretro, en el cementerio capitalino El Prado.
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