Leída por el ministro de la presidencia, Gilberto Carvalho, en su nota la mandataria asegura que el 1 de mayo se transformó en símbolo de la lucha por la dignidad del trabajo en todo el mundo.
Rousseff presenta un cuadro leve de neumonía y tuvo que viajar hoy al hospital Sirio-Libanés, de Sao Paulo, donde pasa por una serie de exámenes.
La gobernante recibió la vacuna contra la gripe el lunes de la semana anterior y en los últimos días disminuyó su ritmo de trabajo e incluso suspendió su participación en algunos eventos, como el acto central de hoy por el día del trabajo en la avenida Marqués Sao Vicente, en Sao Paulo.
En su lugar, Rousseff envió al ministro del Trabajo, Carlos Lupi, mientras Carvalho se encargó de leer su mensaje, en el cual además reitera la disposición de su administración de combatir la inflación con todos los medios.
"No permitiré bajo hipótesis alguna que la inflación vuelta a corroer el poder adquisitivo de los trabajadores", subraya el texto de la mandataria, de acuerdo con un reporte de la estatal Agencia Brasil desde Sao Paulo.
Asimismo, Rousseff recuerda que en los últimos ocho años, el Gobierno del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva promovió la mayor política de empleos ya vista en el país, que permitió generar unos 20 millones de puestos de labor con cartera asignada, vacaciones y un salario extra anual.
Señala que su gobierno va a crear oportunidades para que los trabajadores se califiquen y en ese sentido mencionó el Programa Nacional de Acceso a la Enseñanza Técnica y Empleo, presentado el viernes pasado, el cual transformará la calidad de la formación profesional de los jóvenes obreros brasileños.
Por primera vez en la historia sindical brasileña, este año el acto central, bajo el lema Desarrollo con justicia social, fue organizado de manera conjunta por cinco de las seis principales agrupaciones obreras, menos la Central Unitaria de los Trabajadores (CUT).
Las agrupaciones obreras que decidieron unirse fueron la Central de Trabajadores y Trabajadoras de Brasil (CTB), la Unión General de los Trabajadores (UGT), la Central General de los Trabajadores de Brasil (CGTB), Nueva Central Sindical de los Trabajadores (NCST) y Fuerza Sindical (FS).
Reportes de prensa indican que los diferentes oradores defendieron la reducción de la jornada laboral, la valorización de las pensiones y del salario mínimo, el trabajo decente, la igual salarial para una misma labor entre hombres y mujeres, la reforma agraria, la calificación profesional y la disminución de los impuestos.
El ministro del Trabajo llamó a atender y privilegiar la seguridad laboral, porque hay un alto índice de accidentes del trabajo en Brasil, que afectan al cuatro por ciento de los obreros activos.
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