I
La mitificación que sobre la figura de Ernesto Che Guevara recae, ha
generado la divulgación generalizada de su imagen como un ser
fetichizado, pues se exaltan aspectos de su personalidad al tiempo en
que se ocultan otros, para la industria controlada por el capital, su
imagen es un producto más, explotable carente de su valor real, pero
también, dentro de la propia izquierda, o mejor dicho, de las
izquierdas, su nombre representa una diversidad, quedando en el olvido,
sus postulados y principios concretos, que lo llevaron a entregar su
vida por la humanidad, siguiendo la causa revolucionaria, su ideales de
hacer realidad el sueño martiano y bolivariano de una América unida,
mediante la indispensable desaparición del sistema capitalista, para la
instauración del socialismo como proyecto para la mejora de la condición
humana, sus postulados marxistas y sus aportaciones al pensamiento
latinoamericano antiimperialista y socialista, son una fuente de
conocimiento que ha pasado la suerte inconclusa de ser analizados hasta
cierta medida, quedando aún, pendientes muchos aspectos, las voces que
han dado lugar a su divulgación y estudio, han puesto los cimientos en
una tarea que ahora que se cumplen cincuenta años de su asesinato en
Bolivia, alcanza vigencia más urgente, pues la agudización de las
contradicciones sistémicas, entre las potencias económicas como al
interior de las sociedades, se expresan de manera mucho más violenta y
devastadora para el porvenir de la humanidad.
II
El estudio del marxismo latinoamericano es un pendiente en las
academias de ciencias sociales, dominadas por las modas y los
prejuicios, se alejan de las aportaciones autóctonas de Nuestra América,
dando lugar a las corrientes extranjeras y en los últimos tiempos;
posmodernas, pero también lo es, en el seno de los movimiento sociales.
La disputa dentro del campo de las ideas por la hegemonía, es controlada
en la mayoría de casos por la ideología del capital, aceptando como
verdades las falacias del fin de las ideologías y de manera velada el de
la historia, ante este panorama, se justifican de no contemplar para su
estudio al marxismo, y mucho menos, su interpretación y actualización
realizada desde nuestra patria grande, nombres como José Carlos
Mariátegui, Julio Antonio Mella, José Revueltas, Roberto Fernández
Retamar, Fidel Castro, y desde luego; Ernesto Che Guevara, son olvidados
u ocultados de manera abierta y descarada, para en su lugar, utilizar
ideólogos a modo, menos profundos, o definitivamente, simples
repetidores de la hegemonía cultural del capitalismo.
III
Los contextos donde surge, las raíces que lo nutren, sus
interpretaciones heterodoxas de la realidad, su confrontación con las
hegemonías tanto imperialistas como del propio movimiento
revolucionario, hacen del marxismo latinoamericano una ventana de la
filosofía surgida como respuesta a la dominación, explotación y
marginación, tanto intelectual como material, que se ha vivido y vive
aún, en nuestros países hermanados por la historia y la cultura, es en
ese marco, en el del movimiento filosófico y político, donde tiene su
nacimiento, el pensamiento revolucionario del Che, un hecho concreto que
se niega para dar lugar a la idea de un idealismo especulativo, con el
fin de denostar o rebatir la profundidad de las reflexiones guevaristas,
pero contrario de lo que se divulga en las copulas del poder, la
verdadera raíz de los ideales, conceptos y reflexiones del Che, surgen
de la realidad concreta latinoamericana, y se nutren del contacto del
Che con esta misma realidad, es decir, no son formulaciones de
escritorio, son miradas directas y palpables de la explotación, la
marginación y la permanente negación de la vida humana, que desde
tiempos de la conquista se padece en nuestra Patria Grande. El Che
conoció la América nuestra, la hizo suya, se convirtió en un “Soldado de
América”, y encamino su praxis a la transformación de la realidad para
el mejoramiento humano, su obra intelectual está ligada con sus pasos en
la vida, su vigencia tiene origen ese mismo hecho, en el trágico
acontecer continúo de la agonía humana en el seno del capitalismo.
IV
La travesía en dos viajes que realizó el Che por Suramérica y
Centroamérica, previa a su incorporación definitiva a la causa
revolucionaria en Guatemala, le permitieron entender de manera directa,
los padecimientos de obreros, campesinos, indígenas, mujeres y hombres,
confinados en los rincones más recónditos de la geografía nuestra (esos
mismos rincones a los que jamás llegaran quienes hoy niegan su vigencia y
aportaciones), ahí también, en medio del olvido histórico a los
vilipendiados, se reafirmó en el Che, algo que lo distinguió desde su
juventud; su pación por la lectura. Los libros que fue encontrando o le
fueron proporcionados por quienes convivieron con él en estos dos
viajes, abrieron su pensamiento hasta alcanzar la confirmación de su
tendencia socialista y marxista, hecho que el mismo Che reconoce en
distintas cartas enviadas durante su derrotero a su madre, en esas
misivas, hablaba del estudio de obras y lectura de autores,
sobresaliendo Marx y Engels, además, de libros como Siete ensayos de la interpretación de la realidad peruana
de Mariátegui, textos que concretarían su formación con su accionar en
los movimientos emancipatorios como el cubano, el Che se formó como
marxista lejos de las aulas y en directa convivencia con la realidad
estudiada, su praxis le dio las bases para la comprensión de las
necesidades de Nuestra América.
V
Hace cincuenta años lo asesinaron, lo pretendieron desaparecer,
aniquilar su ejemplo y su virtud, lo convirtieron en mercancía, una
moda, un fetiche, pero se olvidaron que en cada uno de los marginados,
de los vilipendiados, de los explotados, olvidaron que en cada indígena
discriminado, en cada campesino despojado, en cada obrero (mujer y
hombre) explotado, en la juventud que se rebela, en la madurez que
persiste, en cada rincón del mundo en resistencia, Ernesto Che Guevara,
nace y renace, cada día más fuerte, más revolucionario y mucho más
vigente que nunca.
Cristóbal León Campos es integrante del Colectivo Disyuntivas
No hay comentarios:
Publicar un comentario