En estos comicios locales, la oposición conquistó las alcaldías de las tres principales ciudades del país: Cuenca (sur), la capitalina Quito y conserva la de Guayaquil (suroeste).
“Qué bueno que hayamos tenido este remezón, es muy doloroso lo que ha pasado en Quito y peligroso”, declaró el dignatario, advirtiendo, no obstante, de sus temores de que la capital de 2,2 millones de habitantes, en la que se ha impuesto la oposición, se convierta en un foco de ingobernabilidad.
"No conozco a Mauricio Rodas, sí conozco la gente que está detrás de él y esa gente cuenta los días para que se caiga el gobierno, esa gente (...) no dudaría en pegarle un tiro al presidente, esa gente está en contacto directo con la derecha fascista de Venezuela", explicó.
El presidente ecuatoriano, comentando que su partido habría ganado en nueve prefecturas, rehusó hablar de un fracaso del oficialismo a nivel nacional y aseguró que la Alianza País mantiene un “inmenso” apoyo en el país.
No obstante, Correa, tras analizar la derrota de los candidatos de su partido, adujo que “Probablemente estamos cayendo en sectarismos, probablemente nos estamos durmiendo en los laureles.”
Según los primeros datos oficiales, con el 69 % de los votos escrutados, el candidato del partido de la oposición SUMA-VIVE, Mauricio Rodas, de la centroderecha, se hizo en Quito con el 59 % de los sufragios. Asimismo, el Consejo Nacional Electoral (CNE) informó de la victoria de la oposición en el puerto guayaquileño y Cuenca.
Los ecuatorianos eligieron el domingo a 221 alcaldes, 23 prefectos, 1 035 concejales municipales y 4 079 vocales de juntas rurales por un periodo que se prolongará hasta el 14 de mayo de 2019.
El cómputo oficial de los votos concluirá, se espera, en los próximos días.
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