Con 31 votos a favor y 8 en contra, los miembros de la Asamblea Legislativa de Costa Rica decidieron, este último viernes (2), la entrada al país de 48 navíos de guerra y 7 mil militares estadounidenses, que llegarán en los próximos seis meses y que permanecerán hasta diciembre, en el Océano Pacífico y el Mar Caribe. De acuerdo como el Gobierno costarricense, la intención de los militares es combatir el narcotráfico. La entrega de la soberanía nacional del país causó descontento y repudio de muchas organizaciones populares.
Concientes de la gravedad de la situación, el legislador de la Unidad Social Cristiana (PUSC), Luis Fishman, sugirió la quiebra del quórum para no votar el permiso. Sin embargo, no recibió el apoyo necesario para ejecutar su plan. Los partidos de Liberación Nacional (PLN), Movimiento Libertario (ML) y Renovación Costarricense (RC) fueron los principales responsables del otorgamiento del permiso para la entrada de los militares estadounidenses.
Organizaciones sociales y políticas de Costa Rica se mostraron disgustados con la decisión de la Asamblea y emitieron un comunicado urgente alertando sobre el peligro de la entrada de las fuerzas militares estadounidenses al país y abriendo los ojos de la población sobre las reales intenciones de la Jefe de Estado Laura Chinchilla.
Con esta ocupación, Estados Unidos incluye a Costa Rica en su agenda de guerra y transforman a este territorio en un objetivo militar. Además, de acuerdo con el comunicado de la Comisión Nacional de Enlace (CNE), con esta acción, Costa Rica adhiere abiertamente al ‘Plan Colombia’ y pasa a ser parte de los planes de "agresión y guerra" de Estados Unidos contra países latinoamericanos como Venezuela.
"La historieta vendida por el gobierno de Laura Chinchilla de que esta avanzada militar viene para luchar contra el narcotráfico y que los "marineros" vienen para construir escuelitas, nadie se lo cree. En esta nueva fase, la ocupación militar es una consecuencia directa derivada de los compromisos adquiridos en el capítulo de seguridad en el marco del TLC [Tratado de Libre Comercio], firmado por Oscar Arias, que ya había convertido a Costa Rica en un protectorado de Estados Unidos", esclarece el comunicado.
La CNE, desde ya, responsabiliza a los miembros del PLN, ML y RC por cualquier situación negativa que ocurra durante la permanencia de los militares, ya que éstos "adquieren derechos para hacer lo que se les da la gana en el territorio nacional siempre que consideren que sea necesario para cumplir ‘su misión’".
Partidos como Acción ciudadana (PAC), Frente Amplio (FA) y Unidad Social Cristiana (PUSC) se opusieron a la ocupación militar, justificando que la cantidad de militares estadounidenses es excesiva y desproporcionada para el trabajo que ‘supuestamente’ se realizará. Este número de material y personal militar estadounidense no se había visto en el país desde 1821, año en que Costa Rica alcanzó su independencia.
Ante todas las manifestaciones de rechazo, este domingo (4) el Gobierno costarricense negó que esta medida sea un intento de permitir la militarización del país por Estados Unidos. Según informaciones de Telesur, Laura Chinchilla afirmó que el Ministro de Seguridad daría, este lunes (5), más detalles sobre el acuerdo firmado con Washington.
José María Tijerino, Ministro de Seguridad, adelantó a la prensa que la presencia de los militares servirá para reforzar el trabajo que los guardacostas estadounidenses realizan hace 11 años para combatir el narcotráfico. Tijerino aclaró además que el efectivo militar estará bajo sus órdenes.
Traducción: Daniel Barrantes - barrantes.daniel@gmail.com
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