El relator sobre los Derechos de los Trabajadores Migratorios y sus Familias de la CIDH, el chileno Felipe González, pidió hoy a las autoridades mexicanas fortalecer y garantizar los derechos de los migrantes que transitan por México.
De visita en México desde este martes hasta el 2 de agosto, el alto funcionario de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), organismo autónomo de la Organización de Estados Americanos (OEA), expresó su preocupación sobre la situación actual de los indocumentados y de los defensores de migrantes.
González se reunió este día en Ciudad de México con autoridades y activistas para conocer la situación de los indocumentados extranjeros, principalmente centroamericanos, que a su paso por este país son víctimas de la corrupción y crimen organizado.
“Bajo este contexto, México enfrenta retos, como reconocer el aporte significativo que ha hecho y hace la población inmigrante y refugiada a la cultura mexicana”, explicó el funcionario en su página de Facebook.
Insistió en que México debe “desarrollar políticas que den fortalecimiento a los derechos y garantías individuales de las comunidades de tránsito y destino”.
El funcionario se reunió esta tarde en privado con los subsecretarios de Población y Migración, Zenteno Quintero, y el de Derechos Humanos, Felipe Zamora; así como con el comisionado nacional de Migración, Salvador Beltrán, informó la secretaría de Gobernación (Interior) en un comunicado.
Según la nota, las autoridades explicaron detalladamente sobre las acciones oficiales para evitar que el crimen organizado amenace la integridad física de los inmigrantes.
Entre los avances se destacó la despenalización del ingreso irregular al país de los inmigrantes.
González señaló que es importante realizar este tipo de visitas y tener contacto directo con la situación de los inmigrantes y criticó las actitudes de hostigamiento, xenofobia y discriminación racial, en particular contra africanos o afrodescendientes.
Por la noche se reunió con un grupos civiles, quienes le informaron sobre el aumento de secuestros y desapariciones de inmigrantes y el hostigamiento a defensores de los derechos humanos, dijo un representante de una ONG.
Asimismo, recibió un reporte de una comisión de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) , que denuncia que entre 2004 y 2009 se registraron 18 agresiones de autoridades contra defensores y desde 2010 a junio pasado sumaron 44 las amenazas.
El relator de la CIDH se reunirá en los próximos días con otras autoridades y organismos civiles.
Cada año pasan por el país unos 250 mil inmigrantes, la mayoría centroamericanos, muchos de los cuales son víctimas de autoridades corruptas y del crimen organizado.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) de México reportó 11 mil 333 secuestros de inmigrantes entre abril y septiembre del año pasado.
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