Tras realizar una visita a varias cárceles del país, la Relatoría sobre los Derechos de las Personas Privadas de Libertad de la CIDH señaló el “hacinamiento” y las “inadecuadas” condiciones sanitarias que sufren los presos en Uruguay.
Según datos oficiales citados en el informe, el nivel de hacinamiento es del 129 por ciento y en algunos centros alcanza el 200 por ciento, lo que según la CIDH constituye “una forma de trato cruel, inhumano y degradante” .
Además, algunos centros de reclusión, no cuentan con las condiciones mínimas para alojar a los internos, ni condiciones de salubridad, como los módulos 1, 2 y 4 del complejo Carcelario Santiago Vázquez (COMCAR) , que la CIDH recomienda clausurar.
La Relatoría lamentó la falta de programas de estudio y de reinserción y consideró también “inadecuadas” las condiciones laborales y salariales de los funcionarios de las prisiones.
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