Antonio Gershenson
Se celebró la novena reunión anual del Brics, nombre con las iniciales de los cinco países que lo componen: Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. Están muy habitados y suman más de 40 por ciento de la población mundial. Se realizó del 3 al 5 de septiembre, en China, en la ciudad de Xiamen, en el sureste de este país, en una isla del mis- mo nombre.
Se habló del
Brics Plus, con la presencia, como invitados, de otros cinco países, mendiante sus gobernantes, también de diversos continentes, y que si usamos el orden alfabético son: Egipto, Guinea, México, Tailandia y Tayiquistán.
Es muy posible que se haya invitado al presidente de México, entre otras razones, por la situación que se ha generado entre Estados Unidos y nuestro país, cuando el mandatario de la nación del norte ha dicho y hecho cosas que nos afectan.
El gobernante mexicano asistió con acompañantes. Habló y trató con el presidente de la enorme compañía de operaciones de comercio por Internet, Alibaba. Firmaron un trato que incluyó la promoción de productos mexicanos en China y otras medidas.
Además de esas reuniones, el acto incluyó encuentros bilaterales entre gobernantes de unos y otros países.
Organismos empresariales mexicanos allí presentes tuvieron interés en aumentar sus exportaciones a China. Estados Unidos es el primero en la relación comercial con México, pero China tiene el segundo lugar. Exporta más a México de lo que se importa de él, pero ya lo hace con muchos productos, como zarzamora, mora azul, frambuesa, nuez pecanera, uva, aguacate, maíz blanco, productos del mar, algodón en crudo y carne de cerdo. Entre las inversiones chinas en México están la construcción de la Central Hidroeléctrica Chicoasén II, otras destinadas a los estados de Zacatecas, Aguascalientes y Guanajuato, y algunas más en los sectores automotriz, minero, turístico e industrial en general.
Organismos empresariales en México han insistido en que, ante los problemas con Estados Unidos, nuestro país debe crearse un plan b como alternativa. Y este acercamiento con China puede ser parte del mismo.
El diario Washington Post, en un artículo de opinión, resalta que mientras el proteccionismo crece en los países occidentales, China se mantiene como defensor del libre comercio.
Agregamos a otras naciones que participaron en la reunión mencionada.
En México el PRI también ha mostrado, con sus hechos y dichos, la preocupación por las encuestas para las elecciones del año próximo, que lo ubican en el tercero y hasta en el cuarto lugar. El acercamiento del gobierno priísta a China puede explicarse por el contexto electoral. Insisten en decir que las negociaciones con Estados Unidos van bien, aunque los dichos y hechos de Washington indiquen lo contrario.
Un ejemplo fue que inmediatamente des- pués del regreso de China de la delegación mexicana, se anunció la expulsión del embajador de Co-rea del Norte
Y otro, poco antes, fue el sumarse al imperio en los ataques contra Venezuela, aunque en el organismo de países de América se sumó a la posición estadunidense, a pesar de que no se llegó a la necesaria mayoría de dos tercios para aprobar ese acuerdo traicionero contra Latinoamérica y contra la mayoría de los mexicanos. Por eso necesitan negociar en secreto con el imperio.
Quién sabe cuántas concesiones más les han hecho y les harán. Están vendiendo nuestra independencia nacional e internacional. Han vuelto a mostrar que pueden estar a la derecha, incluso de la del PAN.
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