"Primero
hay que reconocer la dinámica natural en la extinción de las especies.
Algunas aparecen y otras desaparecen, incluso están las que se
transforman en otra. A lo largo de la historia hubo cerca de 20
extinciones masivas. Cinco de ellas son las más importantes. Tal vez la
más conocida sea la de los dinosaurios", dijo a Sputnik Enrique
González, integrante de Vida Silvestre Uruguay y encargado de mamíferos
del Museo Nacional de Historia Natural.
También hay especies amenazadas por la acción directa del hombre. "En algunas partes de América del Sur, como Uruguay y buena parte de Argentina, el jaguar está completamente extinto por la cacería. Pero en otras regiones como El Pantanal [llanura aluvial que cubre partes de Brasil, Bolivia y Paraguay] o la Amazonía, todavía es una especie abundante. La situación de una especie puede variar dependiendo de la localidad", explicó el activista.
"Sin
embargo, en la actualidad está ocurriendo un fenómeno que se llama
crisis global de la diversidad biológica, o la sexta extinción. Esto
provocó la aceleración en las tasas naturales de extinción de especies y
tiene que ver con la acción directa o indirecta del ser humano",
explicó González.
Las
islas son muy vulnerables a la acción del hombre. "En estos lugares ha
habido una introducción de fauna accidental por parte del ser humano,
como las ratas que viajaban en los barcos con los navegantes. Estos
roedores trepan a los árboles y se comen los huevos o pichones de los
pájaros. También transmiten enfermedades. Han producido extinciones
locales. Pero además a muchas islas se introdujeron gatos, perros,
chanchos, monos, caballos, una cantidad de fauna que en el continente
puede no tener alto impacto pero a nivel insular produjo la extensión de
muchas especies", enfatizó el ambientalista.
Otras especies
mueren por el cambio climático, como la ballena azul, que debido al
calentamiento global y la acidificación de los océanos que afectan la
tasa de reproducción del kril, su alimento, están en riesgo. Lo mismo
sucede con la tortuga verde. Las temperaturas cálidas promueven el
desarrollo de tortugas hembra. Esto provocó un fuerte impacto en la
composición de su población, según publicó Vida Silvestre Argentina.También hay especies amenazadas por la acción directa del hombre. "En algunas partes de América del Sur, como Uruguay y buena parte de Argentina, el jaguar está completamente extinto por la cacería. Pero en otras regiones como El Pantanal [llanura aluvial que cubre partes de Brasil, Bolivia y Paraguay] o la Amazonía, todavía es una especie abundante. La situación de una especie puede variar dependiendo de la localidad", explicó el activista.
Otro
factor importante de extinción es la modificación, eliminación y
fragmentación de hábitat. "Un ejemplo de esto lo encontramos con el
avance de los cultivos donde se han colonizado grandes áreas de campo
natural para introducir el monocultivo de soja. En Uruguay tenemos el
caso de la forestación con especies exóticas como el eucalipto", dijo
González.
"Todos estos factores juntos, la cacería, la
introducción de especies exóticas, la modificación de hábitat, la
introducción de animales y parásitos, produce que las poblaciones de
algunas especies colapsen. Por todos estos motivos, en algunas partes de
la región están en peligro de extinción el jaguar, el pecarí de collar,
el oso hormiguero grande y el venado de campo", concluyó el
especialista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario