En Honduras, la polémica surgida tras el anuncio del resultado de las presidenciales del pasado 24 de noviembre y la posibilidad de un fraude electoral ha adquirido aspectos más violentos.
La Policía hondureña, en un informe, anunció el asesinato de Graciela Lozano, excandidata a la alcaldía por el izquierdista partido Libertad y Refundación (Libre) y del periodista Juan Carlos Argeñal, de la Radio Globo, afín al expresidente Manuel Zelaya.
La madrugada del sábado, han afirmado las autoridades, Lozano fue atacado por hombres desconocidos en la ciudad caribeña de La Ceiba y perdió la vida a causa de la gravedad de las heridas de bala.
Por otro lado, individuos desconocidos ingresaron a la fuerza a la vivienda de Argeñal, en la ciudad oriental de Danlí, y lo mataron con dos tiros en la cabeza.
El periodista de 43 años de edad, simpatizante del partido Libre, era hermano del coordinador del Frente Nacional de Resistencia Popular en Danlí.
No se trata de la primera víctima de los acontecimientos post electorales en Honduras, la semana pasada, un activista de Libre, José Antonio Ardón, fue asesinado de cuatro balazos por desconocidos cerca de su casa en la capital Tegucigalpa.
Los resultados oficiales de los comicios dieron como ganador al candidato del Partido Nacional, Juan Orlando Hernández, con un 36,8 % de los votos, seguido por Xiomara Castro, esposa del derrocado presidente Zelaya, con un 28,7 % de los sufragios.
Sin embargo, el Partido Libre enfatiza en que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) no presentó 14 993 actas, de las cuales al menos 2 805 respaldaban a Castro.
tas/nl/hnb
No hay comentarios:
Publicar un comentario