Guatemala
En la casi
bicentenaria República criolla de Guatemala, subsisten cuatro pueblos
(dos indígenas y dos coloniales) en condición de subalternidad, bajo el
poder de los criollos y del gobierno norteamericano.
Durante el
primer siglo de la República, los criollos organizaron su Estado sobre
la esclavitud indígena. Durante el segundo siglo republicano, los
criollos, bajo el mando del gobierno norteamericano, remozaron su Estado
esclavista con fachada de Estado de Derecho, y semblante democrático.
Durante
la República, los pueblos indígenas y campesinos, muy a pesar del
Decreto Nº 900 (1952), que en su artículo 2º abolía toda forma de
esclavitud o servidumbre indígena, jamás salieron de la condiciones de
ser NO ciudadanos, y no pocas veces maltratados como “enemigos internos”
del Estado de Derecho criollo. Esquilmados para ser utilizados como
“electores” en rituales de la democracia representativa excluyente.
Esta
verdad incómoda, aflora mucho más en estos tiempos cuando la
“institucionalidad” criolla, o el Estado de Derecho del patrón se
derrumban estrepitosamente con el colapso moral e intelectual de la
oligarquía.
¿Por qué indígenas salen en defensa de la democracia criolla y de la institucionalidad racista?
El
desplome de la “institucionalidad”, o los susurros sobre un supuesto
golpe de Estado, o el rompimiento de la democracia criolla, producto de
la “trifulca intrapatronal”, deberían ser, en el mejor de los casos, una
buena noticia para los pueblos subalternos, o ser aprovechados como una
oportunidad para la soñada sublevación indomestiza.
¡Es el
Estado criollo del patrón el que se cae a pedazos fruto de su entropía!
¡Es la herramienta de dominación y despojo indígena la que se debilita!
Es la democracia representativa anti indígena la que colapsa! ¿Acaso
todo esto no es una buena noticia para los subalternos? ¡El enemigo de
los pueblos indígenas se cae a pedazos!
Pero, no. Ante el colapso
del Estado nación etnofágico, indígenas y campesinos salen a las calles
a protestar pidiendo la restauración del Estado criollo. Ese Estado
anti maya que impuso obligaciones y sufrimiento para indígenas,
campesinos y mestizos. Los NO ciudadanos salen para exigir la
restauración de la democracia y la institucionalidad criolla que los
esquilma. ¡Sí, aunque Ud. no lo crea!
Otro de los matices de esta
pintoresca coyuntura teatral es que casi ningún analista mestizo o
indígena identifica/señala, al gobierno norteamericano como el principal
responsable de este “caos” delirante de la República oficial. Por
tanto, la posibilidad de la emancipación de Guatemala de la dominación
norteamericana tampoco es parte del ideario del indigenismo o de los
“revolucionarios”.
Indígenas y campesinos en resistencia proponen e impulsan un Estado Plurinacional
Ante
el derrumbe del Estado de Derecho criollo, indígenas y campesinos que
no fueron cooptados por la cooperación de la USAID, ni por el oenegismo
colonizador, desde hace algunos años atrás construyen y proponen un
proceso constituyente popular y plurinacional para la creación de un
Estado Plurinacional con autonomías territoriales que posibilite la
soberanía y dignidad plurinacional.
Esta propuesta se afianza aún
más en el contexto del presente ciclo del colapso estatal criollo, y su
correlato teatro de la lucha anti corrupción iniciado por la Embajada
de los EEUU., en 2015.
Las comunidades indígenas en resistencia
que impulsan el proceso constituyente plurinacional, por experiencia
saben que la protesta contra la corrupción sólo lleva al enroque de un
corrupto por otro, vía elecciones excluyentes. Ellos saben que defender
el Estado de Derecho criollo, o la institucionalidad criolla, lejos de
mejorar sus vidas, empeorará sus condiciones de vida subalterna. Por
eso, surfean sobre las olas emotivas de la “guerra anti corrupción” para
posicionar social y culturalmente su propuesta de cambios estructurales
en el imaginario plurinacional del país.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario