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miércoles, 6 de noviembre de 2013

Sánchez Cerén supera los porcentajes negativos de su candidatura


UNIDAD decrece en la medición de LPG. El vicepresidente sube en intención de voto. Norman Quijano desciende en preferencias. Indecisos oscilan entre 20 a 10 puntos porcentuales

Redacción ContraPunto

¿Qué debe hacerse para que un candidato como Salvador Sánchez Cerén, que inició la ruta a las presidenciales con porcentajes desfavorables a su imagen e intención de voto, logre mejorar sus deficiencias para incluso conseguir que sus dos principales adversarios decrezcan? Los números están en las encuestas de LPG-Datos que registra que el exministro de Educación gana el 29.4% de las preferencias de 1.500 encuestados en noviembre; Norman Quijano, 27.6%; el expresidente Elías Antonio Saca, 12.0%. Los resultados de la medición publicada en septiembre fueron diferentes: 30.9% para Quijano; 25.7%, Sánchez y 18.1%, el ex mandatario. Las tendencias, a la que se suma la consolidación de la bandera efemelenista, los ubican como una opción fuerte para ganar el boleto a segunda vuelta en las presidenciales.

La tendencia para Cerén era negativa en diciembre de 2012: el 34.4 de los encuestados (de 1.200) tenían una imagen negativa versus un 35.8 positiva. El balance entre negros y blancos hacía pensar a analistas de izquierdas y derechas que el ex comandante insurgente era una especie de carga para los efemelenistas para su propósito de continuar en el poder.

En septiembre las razones para votar por ARENA – así preguntaba LPG – eran: porque gustaba a los electores, 12.6%; el candidato, 12.1%; y su trabajo, 9.6%. En noviembre los motivos son similares: el partido, 12.9%; quiere cambios, 9.4%; y candidato, 8.5%. La última opción ha decrecido 4.4 puntos porcentuales en perjuicio de la aspiración presidencial de Quijano.

Hace tres meses, UNIDAD obtuvo: candidato, 29.6%; propuestas, 11.8; trabajo, 6.5%. En noviembre: candidato, 19.9%; propuestas, 14.4%; trabajo, 8.2. El porcentaje de simpatías a favor de Saca ha disminuido 9.7 por ciento.

En marzo de este año, Sánchez Cerén registraba un porcentaje de 34.1 a su favor en la evaluación de su imagen, mientras los negativos eran similares; Quijano era el que mayor puntos obtenía: 60.9%; atrás de él estaba el expresidente con 53.0%

Fue a principios de 2013 que Quijano ordenó el desalojo violento de los vendedores del Centro Capitalino, lo cual le restó puntos ante la opinión pública. ARENA, asimismo, anunciaba la candidatura de René Portillo Cuadra a la vicepresidencia, que hasta el momento no le ha ayudado a levantar popularidad. La presencia del académico recién es frecuente en la televisión y en debates públicos. En febrero Saca oficializaba su candidatura en medio de una campaña de expectación que había iniciado desde mediados de 2012. Sobre el vicepresidente aún pesaban las campañas negras que lo relacionaban con un pasado belicista y posturas ideológicas vinculadas a la Guerra Fría, aunque había sectores que lo identificaban más por su desempeño en el Ministerio de Educación.

En junio el descenso de Quijano fue más notorio: había disminuido su imagen hasta 30.3, es decir, 30.6 puntos porcentuales menos que cuatro meses antes. Los números positivos de Cerén también disminuyeron a 24.7 y los de Saca a 21.8 por ciento. El porcentaje de indecisos era de 13.6 por ciento. En dicho momento el enfrentamiento entre la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema (CSJ) y la Asamblea Legislativa estaba en su culmen y las marchas en apoyo a uno u otro bando se tomaba las calles. En este mes el presidente del parlamento, Sigfrido Reyes, proclamaba presidente del Órgano Judicial al magistrado de la Sala de lo Civil, Ovidio Bonilla Flores, que había sido declarado inconstitucional junto a sus colegas de las magistraturas 2006 y 2012.

En septiembre, Quijano volvió a los porcentajes favorables: 58%. Sánchez Cerén a sus 34 puntos y Saca a 47.4. El porcentaje de indecisos disminuyó a 10.4. En este mes los efemelenistas divulgaron parte de sus propuestas de gobierno y su candidato seguía sostenido por la popularidad del partido que lo empuja. En estos meses también se conocieron mediciones de otras casas encuestadoras que le daban el primer lugar al FMLN en intención de voto y acortaban brecha entre el alcalde de San Salvador y el vicepresidente. Saca, mientras tanto, consolidaba su proyecto de abrir Casas de Unidad en el interior del país como una estrategia de presencia territorial.

En noviembre, el FMLN lleva el primer lugar con 29.4 puntos; ARENA, 28.3; UNIDAD, 9.8% y el porcentaje de indecisos llega a 13.9. Curiosamente, LPG no publicó los porcentajes de la evaluación de la imagen de los candidatos.

Desde marzo los porcentajes por bandera para los efemelenistas se han movido así: 28.3%; junio, 27.5; septiembre, 24.5; noviembre, 29.4. Para ARENA: 31.7; 26.3; 29.8 y 28.3. Mientras los puntajes entre los dos primeros lugares han sido parejos, para UNIDAD el proceso ha sido diferente: 13.7 en junio; 13.7, septiembre; para finalizar el año con 9.8.

La bandera de la coalición, al igual que la candidatura de Saca, inició con buenas expectativas, se estancó y finalmente decrece en meses en que la campaña electoral está en curso y los contendientes tienen vía libre para pedir el voto.

¿Cuáles son los factores que han influido en el crecimiento de los números de Sánchez Cerén? A su favor juegan los programas de responsabilidad social empresarial que impulsa Alba y en los cuales es frecuentemente invitado a presidir; los programas sociales implementados por el Gobierno de Mauricio Funes y la campaña de propuestas en las que evita los ataques frontales contra sus oponentes. ¿Qué lo puede afectar? La campaña negra y que el FMLN confronte con la Sala de lo Constitucional, lo que ha sido con malos ojos por sectores educados de la clase media.

¿Qué afecta a Quijano? La marca ARENA tiene un desgaste después de 33 años de existencia y 20 más en el poder; las denuncias públicas de Funes, que vincula a los gobiernos pasados con hechos de corrupción y descuido de las clases pobres, así como el papel que durante más de dos décadas jugaron en la Asamblea cuando aprobaron, en los llamados “madrugones” leyes como la dolarización y tratados de libre comercio.

Saca y UNIDAD tienen dos desafíos: el primero debe saber saltar las constantes acusaciones de corrupción y enriquecimiento ilícito. Los segundos consolidar su marca en menos de cuatro meses y organizarse territorialmente.

Con el voto de los indecisos, FMLN o ARENA ganaría en primera vuelta. UNIDAD logra entrar en segunda. Desde marzo a noviembre los porcentajes de este sector han oscilado en: 12.4; 19.6; 13.9; y 14.9.

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