En la misiva, divulgada hoy, Lozano expresa su solidaridad al Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo (Cajar), que representó a varias víctimas, por estos días cuestionado por el Gobierno por presuntas anomalías en la conocida masacre de Mapiripán.
En esa localidad del departamento de Meta al parecer fueron asesinadas por los paramilitares en el año referido una decena de personas y no 50 como se creía, según denuncias e investigaciones avaladas por el Estado.
"Conozco muy bien la honestidad y el compromiso del Cajar con los derechos humanos", subraya Lozano en la carta, dirigida a Eduardo Carreño, miembro de ese colectivo.
Si alguna irregularidad ocurrió en lo de Mapiripán fue asaltada tu buena fe como la del Colectivo. No me cabe la menor duda, Aunque estoy seguro que la masacre la hubo, más allá de si un vivo o una viva se metió entre las víctimas. No es tu responsabilidad, agrega.
Lozano también advierte que la derecha y el militarismo quieren aprovechar el escándalo para linchar al Colectivo y cobrarle las denuncias y la eficacia en la lucha contra los depredadores de los derechos humanos. No lo podemos permitir. El Colectivo es necesario en esta causa popular y democrática. Es un patrimonio de los más débiles, de los que sufrimos las embestidas del régimen de oprobio, señala.
El caso de Mapiripán es objeto hoy de investigación luego que la Fiscalía diera a conocer una cifra menor de víctimas en esa acción perpetrada por paramilitares en 1997.
De acuerdo con la Fiscalía, ello fue posible por versiones rendidas ante la justicia por los propios criminales.
Por su parte, el Cajar sostuvo que actuó de buena fe, basado en el testimonio de paramilitares y familiares de los desaparecidos.
También expresó que la Fiscalía en su momento recogió los mismos datos y corresponde a las falsas víctimas responder ante la justicia.
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