Director general de Promoción Cultural Comunitaria, dijo a Prensa Latina que esa herencia fue minimizada durante la dictadura de 1954 a 1989. En esa atapa, añadió, los afrodescendientes fueron perseguidos, avasallados, y su cultura despreciada.
Partimos de una declaración del censo nacional de 1962, que desconocía la presencia negra, abundó.
Con la alborada democrática que vivimos corregiremos esos errores o por lo menos afianzaremos entidades, dinamizaremos culturas y garantizaremos el ejercicio ciudadano,
Sosa participó aquí en el recién concluido taller sobre patrimonio cultural inmaterial y las comunidades afrodescendientes en América Latina, que reunió a investigadores de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Paraguay, Perú, Uruguay y Cuba como anfitriona.
Tenemos sueños y vamos a seguir la lucha para facilitar los mecanismos de participación de las comunidades. En nuestros anhelos nos inspira la labor solidaria de Cuba, dijo.
Solidaridad con el pueblo paraguayo, manifestada no solo en tiempos de la dictadura, sino ahora en nuestro proceso democratizador con la formación de médicos, asistencia ética y, sobre todo, su ejemplo revolucionario, resaltó.
Por eso compartimos su fortaleza en la lucha por la soberanía popular, y me uno al reclamo internacional por la libertad de los Cinco antiterroristas cubanos presos en cárceles norteamericanas, un proceso judicial que constituye un atropello a los derechos humanos, asveró.
Gerardo Hernández, René González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero y Fernando González cumplen injustas condenas por combatir el terrorismo contra su país, denunció.
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