"Si
bien prevalece la indiferencia hacia EEUU (54%), se extiende la minoría
que siente desprecio hacia ese país, pues pasa de 16% a 30%", indica el
reporte.
Entre enero de 2015 y enero de 2017, el porcentaje de
mexicanos que consideran "mala" la relación con EEUU subió más cuatro
veces, de 13% a 59% de los encuestados por la empresa demoscópica.Mientras que el sentimiento de "desconfianza" hacia esa potencia vecina se elevó de 38 a 57 puntos porcentuales en el mismo lapso.
"EEUU
no ha sido particularmente admirado por los mexicanos en tiempos
recientes y ahora menos con apenas un 11%" de los entrevistados que
admiran al país vecino, dice el informe firmado por los responsables de
la compañía, Ulises Beltrán y Alejandro Cruz.
El sondeo muestra un
respaldo de 63% a la manera como el presidente Enrique Peña Nieto
enfrenta las posturas de Donald Trump contra México, sin embargo la
popularidad del líder latinoamericano apenas mejora y sigue por los
suelos.
La
aprobación del mandatario mexicano sigue en los más bajos niveles desde
que comenzaron estos registros en los años 1990, según el sondeo
realizado con entrevistas telefónicas a 400 mayores de 18 años, con un
margen de error de +/- 5%.
El tema de la popularidad del
presidente tiene un seguimiento más frecuente, y en dos semanas apenas
subió de 11% al 15% durante la controversia con EEUU, en el ascenso a la
Casa Blanca del magnate republicano.Contra el muro y su pago
Los mexicanos no juzgan por igual al pueblo de EEUU y al presidente Trump, según el resultado del estudio.
El millonario republicano "mantiene una profunda animadversión", con 88% que lo califica "mal o muy mal", en cambio, sobre los estadounidenses en general las opiniones son 40% positivas y 36% regulares.
Los
temas más mencionados en el sondeo de la relación con el nuevo
presidente estadounidense son la situación de los migrantes, las
deportaciones y el Tratado de Libre Comercio de América del Norte
(TLCAN, vigente desde 1994), seguidos por la construcción del muro, la
economía y la depreciación del peso ante el dólar.
Los mexicanos
esperan que el gobierno de Peña Nieto rechace de plano la intención de
Trump de construir el muro fronterizo (70%) y aún más su exigencia de
que México lo pague (87%).En cambio, una amplia mayoría de 67% ve poco o nada factible que EEUU logre un pago directo del Gobierno mexicano y las opiniones se dividen sobre si podría hacerlo mediante la apropiación de parte de las remesas de mexicanos, que suman 25.000 millones de dólares anuales.
A
pesar de la oposición de México a pagar el muro, se cree que el
gobierno estadounidense tiene capacidad para lograrlo unilateralmente,
por ejemplo, a través de un impuesto de 20% a las exportaciones
mexicanas, un sobrecosto a las visas para turistas mexicanos o impuestos
a las remesas.
Los encuestados apoyan además una actitud negociadora para revisar el TLCAN y la cuestión de las deportaciones.El apoyo a una postura negociadora en la revisión del TLCAN es de 76%, en la cuestión de las deportaciones de migrantes indocumentados el respaldo es de un 53%, y sobre la expulsión de aquellos que cuentan con antecedentes criminales es de un 46%.
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A raíz de esta confrontación, se deteriora la percepción de los mexicanos sobre la relación bilateral entre ambos países, y la confianza en EEUU sufrió un derrumbe casi total de 27% a solo 4%.
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