El rumor venía desde hace varios días, afirmó el presidente de esa instancia legislativa, Juan Fernando Cristo. Llama la atención que pretenda cumplir lo que nunca logró como gobernante, dijo.
Durante el último siglo, sostuvo, es el único colombiano que tuvo la oportunidad de dirigir el país, no por cuatro sino ocho años (2002-2010), sin que le alcanzara ese lapso para cumplir y ejecutar las metas prometidas.
En su plataforma programática con vistas a las elecciones de marzo del próximo año, Uribe planteó como principales objetivos la seguridad democrática, la confianza inversionista, cohesión social, diálogo popular y un Estado "austero en sus gastos y expansivo en sus obligaciones sociales".
De acuerdo con las premisas electorales, el exmandatario, cuya candidatura impulsa el movimiento político Centro Democrático promovido por él, tendrá que presentar, en noviembre venidero, 50 mil firmas que avalen su candidatura.
Una tarea compleja, opinan analistas, cuando faltan solo unos dos meses para esa fecha.
Al referirse a la postulación uribista, el senador Roy Barreras dijo desear "mucha suerte a un expresidente profundamente equivocado sobre la paz en Colombia", lo que permitirá a los colombianos escoger entre dos líneas muy claras: la paz o la guerra.
En un mensaje en su cuenta de Twitter, el congresista Ivan Cepeda ironizó "me alegra que se postule al Senado. Ya podremos vernos cara a cara".
Cepeda destapó hace varios meses, con pruebas testimoniales, los nexos del mandatario con varios jefes paramilitares, hoy en prisión, con quienes trabajó estrechamente en su hacienda Guacharacas cuando era gobernador del norteño departamento de Antioquia donde nacieron las llamadas Autodefensas Unidas de Colombia.
Por su parte, la presidenta del Partido Polo Democrático Altermativo, Clara López, señaló que no teme que el Centro Democrático ocupe el espacio de la oposición.
Es obvio que Uribe y sus candidatos apoyan el libre comercio, el manejo privado de la salud y otros temas en los que el gabierno actual ha fracasado. "Esperamos, añadió, que la gente entienda que no es lo mismo una oposición gobiernista y una oposición alternativa".
Formulado en las primeras horas de la mañana desde la puerta de su casa en Rionegro (Antioquia), el anuncio de Uribe generó dos líneas de reacciones.
Una que considera que su decisión "dinamizará el debate al fortalecer la oposición en el Congreso", y otra según la cual los ocho años en que ejerció la presidencia fueron suficientes para que demostrara lo que puede hacer por el país.
En este último sentido, el senador del movimiento Progresista, Camilo Romero, calificó el anuncio uribista como "más de lo mismo".
Mientras, persiste el criterio, cada vez más generalizado, de que le será muy difícil hacerle oposición a sus propias políticas que durante ocho años agudizaron la crisis que hoy vive el país.
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