José Mujica, recién electo Presidente de Uruguay
La iniciativa fue planteada a varios miembros del oficialismo en una reciente visita a Montevideo del presidente de Drugs Peace Institute, Frans Bronkhorst, indicó hoy a Efe el diputado Sebatián Sabini, del bloque gubernamental Frente Amplio (FA) y e impulsor de ese tipo de políticas antidrogas en el Parlamento uruguayo.
Por su parte, en una entrevista grabada en vídeo y publicada en la edición digital del diario uruguayo El Observador, Bronkhorst asegura tener el beneplácito del mandatario para su postulación, extremo que no pudieron confirmar fuentes de la Presidencia consultadas por Efe.
Según Bronkhorst, “Mujica es el primero que en el mundo ha propuesto acabar con esta guerra”, que “a nadie sirve, solo a intereses oscuros”, consideró.
El Drugs Peace Institute, creado en 1994, aparece en el listado de ONG de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) a nivel mundial, donde es definida como una entidad que trabaja “por el aumento de la concienciación entre los usuarios de drogas sobre la calidad de los productos que consumen” y por “su integración en la sociedad”.
Sabini se mostró conforme con el reconocimiento a Mujica aunque opinó que debería extenderse a otras facetas personales del mandatario, que “ha hecho muchas cosas buenas a lo largo de su vida y a ha dado muestras de grandeza en muchos sentidos”.
“Siempre ha tenido un espíritu de concordia muy grande y de búsqueda de consensos y que creo que es un valor muy superior para un presidente”, manifestó.
El legislador rechazó que el pasado de Mujica, que por su lucha guerrillera estuvo catorce años en la cárcel, la mayoría durante la dictadura (1973-1985), pueda jugar en contra de la candidatura.
“El Nobel a veces es un poco contradictorio”, argumentó Sabini, al recordar que la academia sueca ha galardonado antes “a un presidente que tiene el mayor ejército del mundo”, en alusión al estadounidense Barack Obama, que lo recibió en 2009.
Mujica lanzó el año pasado una novedosa propuesta para frenar la creciente delincuencia juvenil en su país consistente en otorgar al Estado el práctico monopolio del negocio de la marihuana como forma de evitar que los jóvenes compren el cannabis a las mismas mafias que reparten drogas duras en las que terminan cayendo.
Según el oficialismo, el consumo de la pasta base de cocaína, una droga muy fuerte, barata y adictiva, es la causa de decenas de crímenes violentos cometidos por menores de edad que en los últimos años han conmovido a la opinión pública uruguaya.
El polémico proyecto oficialista de despenalización de la marihuana se encuentra actualmente estancado en el Parlamento después de que Mujica pidiera en diciembre pasado frenarlo hasta lograr el apoyo ciudadano a la propuesta, que es rechazada por la mayoría de la población, según las encuestas.
(Con información de EFE)
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un genio total
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