31 de diciembre de 2011 | 17:27:30
El duro y exitoso trabajo desarrollado por el Gobierno Sandinista para lograr el crecimiento de la economía en medio de la crisis internacional, con el fin de financiar la ampliación de la lucha contra la pobreza y el mantenimiento de los programas sociales, caracterizó el año que termina.
A pesar de la casi catastrófica situación económica mundial, caracterizada por los serios problemas enfrentados por las grandes potencias del orbe y su impacto en los países emergentes y más pobres, la correcta política en ese sector del Gobierno del Presidente Daniel Ortega permitió que se cierre 2011 con un Producto Interno Bruto superior al cuatro por ciento.
Una estrategia macroeconómica correcta, un entendimiento entre los factores sociales que inciden en la producción y la economía en general, las facilidades otorgadas a la inversión extranjera y el crecimiento sostenido de las exportaciones, fueron características de los últimos 12 meses.
Los resultados de ello y la participación del país en la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), permitieron, por ejemplo, enfrentar exitosamente el alza de los precios energéticos, la crisis alimentaria existente en todo el planeta y mantener la ayuda sostenida a la población mediante los mencionados programas sociales.
Algunos de ellos son verdaderos programas bandera del Sandinismo, basados en la existencia de un sistema bien definido como Cristiano, Socialista y Solidario, y que prueba en el día a día su cumplimiento con esos principios.
Es fácil de comprobar lo sucedido durante el 2011 si hablamos de lo que han significado para ello empeños del Gobierno como el Bono Productivo, Usura Cero, Planes Techo, Calles para el Pueblo y Hambre Cero. Todos ellos tienen como fin fundamental la inclusión de los más pobres y de los abandonados por muchos años de vigencia del neoliberalismo.
Usura Cero, nacida en julio del 2007, ha otorgado créditos a más de 100 mil mujeres, fundamentalmente madres solteras y cabezas de familia, convirtiéndolas en pequeñas empresarias, ayudándoles a incrementar sus modestos negocios y constituyendo un importante aporte al mejoramiento de la economía familiar.
Muchas de ellas, una vez solventada la devolución con mínimos intereses de los mencionados préstamos, obtuvieron otro o varios más y vieron normalizada su vida en forma permanente.
Por supuesto, también los hombres tienen acceso a los créditos y micro créditos, en todos los casos sin tener en cuenta colores políticos, y ya se anuncia que en el próximo quinquenio de Gobierno Sandinista se entregará medio millón más de esas importantes ayudas.
Una muestra del desarrollo de este programa y su vinculación con la producción es que para el ciclo agrícola 2012 – 2013 se anunció ya la entrega de más de 101 mil créditos por el Banco Produzcamos, otra importante herramienta social creada por el Gobierno.
Ese Banco tiene destinado un fondo de 900 millones de córdobas para el financiamiento a pequeños y medianos productores.
En el objetivo de redistribuir la riqueza se inserta también el Bono Solidario que reciben mensualmente más de 170 mil trabajadores estatales y los casos críticos de personas con discapacidad, detectados en la amplísima operación solidaria que llevó adelante la brigada Todos con Voz.
Dicha brigada, integrada por médicos cubanos y nicaragüenses recorrió todo el territorio nacional identificando a las personas con capacidades diferentes, clasificándolas de acuerdo al tipo de casos y construyendo un inédito inventario que permite al Gobierno la asistencia directa a los afectados.
La guerra abierta contra la existencia de las casas con techos de cartón y plástico heredadas de muchos años de desprecio al pueblo, permitió que Daniel y Rosario, acompañados por el Cardenal Miguel Obando, entregaran decenas y decenas de miles de Planes Techo a quienes pudieron desde entonces dormir tranquilos sin que el agua se les colara dentro de sus humildes viviendas.
Otro elemento interesante a destacar que muestra la voluntad del gobierno para avanzar en la batalla contra la pobreza fue que, en el Presupuesto General de la República del 2011, se dedicó casi el 55 por ciento al gasto social y a proyectos productivos que inciden seriamente en la mitigación de la pobreza.
Durante el año, se llevó adelante exitosamente el empeño en magnificar los servicios de salud y la educación pública gratuitos que dieron la oportunidad a millones de nicaragüenses de acceder a ellos, eliminando la brecha enorme que les separaba de esos servicios vitales por su falta de posibilidades y por el desinterés de las anteriores administraciones del Estado.
La erradicación del analfabetismo, la merienda escolar, la retención escolar que alcanzo cifras record, las becas costeadas por el Gobierno y las que fueron conseguidas para estudios en otros países, significaron un monumental movimiento educacional jamás visto en Nicaragua que representará la elevación técnica y cultural de infantes, jóvenes y adultos y que tiene expresión en el nivel promedio de sexto grado proyectado para el 2012 y en la lucha por el noveno en la próxima etapa.
Incentivo especial y muy reciente constituyó la entrega del Bono Promoción a los estudiantes que finalizaron exitosamente sus estudios de bachillerato, recibido con gran alegría por quienes dedicaron todo su esfuerzo a terminar exitosos su curso final.
Mientras la crisis abate a otras naciones, en Nicaragua se ha elevado el salario mínimo de los empleados públicos en más del ciento por ciento durante el período de gobierno que ahora concluye, y en el cual, por otra parte, el gobierno entregó miles de Bonos Productivo Alimentario.
El año 2011 significó también la materialización de un avance impresionante en la renovación del parque de transporte público en Managua con la llegada de centenares de buses rusos y mexicanos, así como de taxis dedicados a facilitar a la población su transportación.
El subsidio estatal permitió que ni uno solo de los pasajeros de esos medios de transporte modernos viera aumentado el costo de la transportación por decisión expresa del Ejecutivo.
Si trascendentales fueron los avances alcanzados en el 2011 y que sólo hemos mencionado en parte, así como los recursos destinados para ello por el Gobierno, ya pueden avizorarse nuevos triunfos al conocerse detalles del Presupuesto presentado por el Presidente Daniel Ortega al Congreso y aprobado por los parlamentarios.
Sólo baste decir que el capítulo destinado al combate a la pobreza representará un monto de 24 mil 54.5 millones de córdobas, o sea el 56,9 por ciento del gasto total.
La decisión es eliminar totalmente la pobreza del territorio de Nicaragua y vencer tamaña meta sólo puede conseguirlo un Gobierno Sandinista bajo la dirección de Daniel y Rosario, tal como lo han demostrado.
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