“No podemos apoyar ninguna resolución que incluya el llamamiento a apoyar la salida de Al Assad de su puesto”, aseguró Guennadi Gatílov, viceministro de Exteriores ruso.
Gatílov lamentó también que el proyecto tampoco descarte una posible intervención militar e insista en la adopción de sanciones contra el régimen de Al Assad.(RIA Novosti)
La Radio del Sur /Agencias
Rusia anunció este viernes que vetará en el Consejo de Seguridad de la ONU el proyecto de resolución árabe sobre Siria que pide la renuncia del presidente de ese país, Bashar al Assad.
“No podemos apoyar ninguna resolución que incluya el llamamiento a apoyar la salida de Al Assad de su puesto”, aseguró Guennadi Gatílov, viceministro de Exteriores ruso, a la agencia Interfax.
El diplomático subrayó que “cualquier decisión sobre el futuro arreglo político en Siria debe adoptarse durante un proceso sin condiciones previas, y demandar la dimisión de Assad es una de esas condiciones previas”, reseñó EFE.
“Este proyecto fue preparado inicialmente por los franceses, y ahora ceden la iniciativa a los países árabes, en particular Marruecos, que va a remitir ese proyecto al Consejo de Seguridad”, apuntó.
Gatílov lamentó también que el proyecto tampoco descarte una posible intervención militar e insista en la adopción de sanciones contra el régimen de Al Assad.
“Todo es posible. Pero este es un proyecto condenado al fracaso, ya que nuestra opinión y la de nuestros socios chinos ya ha sido expresada con claridad”, indicó.
El viceministro subrayó la postura rusa de que cualquier resolución sobre Siria debe llamar “no sólo al Gobierno sirio, sino también a la oposición, a cesar la violencia e iniciar un diálogo nacional sin condiciones previas”.
El proyecto de resolución llama a “facilitar la transición política hacia un sistema político plural y democrático (…), a través del traspaso de poder del presidente y unas elecciones libres y transparentes”.
Rusia, que acusa a EE UU de querer aplicar en Sirio el guión libio -sanciones internacionales, embargo aéreo, intervención militar occidental y cambio de régimen-, ya vetó en octubre junto a China un proyecto europeo de condena a Damasco por la supuesta represión violenta de las manifestaciones opositoras.
El gobierno sirio ha denunciado que en las filas de los grupos opositores armados hay mercenarios y miembros del grupo terrorista Al Qaeda, todos financiados y armados desde Turquía y Qatar.
Desde hace meses, miles de personas se movilizan diariamente en defensa del gobierno de Al Assad y en rechazo a las sanciones contra el país, impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea.
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