Por Vianco Martínez (*)
SANTO DOMINGO - La escritora centroamericana Claribel Alegría aseguró que hay una conspiración de silencio para impedir que se conozca la verdad del asesinato del poeta Roque Dalton, abatido por sus propios compañeros el sábado 10 de mayo de 1975.
“Hay una conspiración de silencio parecida a la que hubo con Federico García Lorca”, dijo la escritora antes de partir de Santo Domingo, donde participó en el III Festival Internacional de Poesía.
Alegría pidió que se abra una investigación sobre las circunstancias en que fue asesinado el escritor. “Sí, a mí me gustaría que investigaran bien el caso y que dijeran toda la verdad”.
Dalton fue asesinado por dirigentes del llamado Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) a la edad de 39 años, bajo las acusaciones de ser un “traidor”, y de que “podría ser agente de la CIA”. Y que era demasiado bohemio.
Según informaciones recabadas por sus familiares y por la Comisión de la Verdad de las Naciones Unidas, su cadáver fue tirado entre las rocas de una zona volcánica llamada El Playón, donde se lo comieron los perros y las aves de rapiña.
El Presidente Mauricio Funes lo definió como “nuestro más grande poeta” pero nombró a Jorge Meléndez director de Protección Civil de su gobierno.
La responsabilidad del crimen ha recaído sobre los dirigentes del ERP Joaquín Villalobos, Jorge Meléndez y Edgar Alejandro Rivas Miera, ubicados en ese momento en la cúpula de la organización político-militar.
Las acusaciones más graves comprometen al hoy consultor internacional Villalobos. Según Juan José Dalton, hijo del poeta, éste le habría dado un tiro de gracia en la cabeza para rematarlo, luego de ser baleado en otras partes del cuerpo por sus amigos en un improvisado paredón.
Joaquín Villalobos vive tranquilamente en Inglaterra y es consultor de seguridad de varios gobiernos latinoamericanos, entre ellos los de México y Colombia. En Santo Domingo fue conferencista en el Foro Internacional de Santo Domingo.
Democracia, crecimiento con equidad y cohesión social en América Latina, realizado en la Fundación Global y Democracia (FUNGLODE) entre los días 28 y 29 de octubre del 2009. Como una tragicomedia ante el asesinato que se le atribuye, su tema fue Democracia, seguridad y crimen organizado.
Joaquín Villalobos, señalado como el principal responsable de la muerte del poeta, vive tranquilamente en Inglaterra, consultor y que ha sido conferencista de FUNGLODE.
Jorge Meléndez, conocido durante la guerra salvadoreña como Comandante Jonás, es director de Protección Civil del gobierno de Mauricio Funes. Aunque vive asediado por los periodistas, se ha negado a ofrecer detalles de su participación en el crimen. Sin embargo, ha admitido que estaba presente al momento de la ejecución.
Luego de asumir la presidencia de El Salvador, Funes definió a Roque Dalton como “nuestro más grande poeta” pero nombró a Jorge Meléndez director de Protección Civil de su gobierno.
Claribel Alegría y Roque Dalton
Claribel Alegría se enteró de la muerte de Roque Dalton a través de una llamada telefónica que le hizo el poeta salvadoreño Roberto Armijo a su casa en Mallorca, España.
“Estábamos mi esposo y yo en la casa de Mallorca cuando suena el teléfono. Era Roberto Armiño, un poeta salvadoreño, también muy amigo nuestro que vivía en París, para decirme que habían asesinado a Roque. En ese momento nadie sabía nada de cómo se habían hecho las cosas”.
Alegría, quien mantuvo una intensa relación epistolar con el poeta asesinado, hizo una sentida valoración de su obra y su figura. “Roque, además de gran poeta, era un hombre muy honesto, que vivía lo que predicaba”.
Según la escritora, Dalton dejó una obra extensa pero desigual debido a que escribía con mucha prisa.
“Escribía como muy a prisa, como si él supiera que su vida iba a ser corta. Siempre escribía cada vez mejor. Hay un libro de el que se ganó el Premio Casa de las Américas, que se llama Taberna y otros lugares, que es un libro muy bueno, muy bueno.
Claribel Alegría guarda aún algunas de las cartas que le remitió el poeta. “Me hablaba de la comida salvadoreña, de los olores, de los sabores, de las costumbres y tiene mucha nostalgia por todo aquello que le faltaba cuando estaba en el extranjero”.
(*) Tomado de www.barrigaverde.net
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