Sputnik
"Pensamos
que los ministros no están haciendo una lectura correcta del conflicto y
no les están informando la verdad al presidente Evo Morales. De no ser
atendidos, el lunes haremos una evaluación y no nos quedará otro camino
que la huelga general indefinida", advirtió el dirigente.
Este miércoles, trabajadores mineros, fabriles, del sector salud, empleados municipales y maestros urbanos de al menos cinco departamentos del país paralizaron actividades y tomaron las calles cumpliendo la disposición del mayor sindicato boliviano de trabajadores.
En La Paz, grupos de trabajadores que participaban de un bloqueo de la vía principal que une esta urbe con la ciudad de El Alto fueron dispersados por efectivos policiales que hicieron uso de gases lacrimógenos.
En Cochabamba (centro) policías y trabajadores fabriles se enfrentaron dejando un saldo de una decena de heridos contusos en ambos bandos. En otros ciudades como Santa Cruz (este), Oruro y Potosí (sur) las manifestaciones transcurrieron sin incidentes.
"Pedimos que hagan una lectura cabal, que vean cómo ha sido la movilización, la participación de los sectores y (los ministros) de una vez le digan al Presidente que responsa positivamente para solucionar los temas que hemos planteado", afirmó Mamani.
La COB no solo plantea la abrogación del decreto 2765 que cierra Enatex y la restitución de los trabajadores a esa empresa, sino también la modificación a la Ley de Pensiones, una nueva Ley General del Trabajo y que se atienda la demanda de las personas con discapacidad que se hallan movilizadas por más de dos meses en La Paz, explicó el sindicalista.
"Están minimizando el paro, pero a partir de este jueves se integrarán más sectores a la huelga y seguramente habrá marchas y bloqueo de carreteras", anunció.
La más importante central sindical de este país sudamericano se halla enfrentada al Gobierno de Morales con el que hasta hace una semana mantenía un pacto político de respaldo al llamado proceso de cambio.
La COB inició sus medidas escalonas con un paro de 24 horas el pasado 20 de junio.
Este miércoles, trabajadores mineros, fabriles, del sector salud, empleados municipales y maestros urbanos de al menos cinco departamentos del país paralizaron actividades y tomaron las calles cumpliendo la disposición del mayor sindicato boliviano de trabajadores.
En La Paz, grupos de trabajadores que participaban de un bloqueo de la vía principal que une esta urbe con la ciudad de El Alto fueron dispersados por efectivos policiales que hicieron uso de gases lacrimógenos.
En Cochabamba (centro) policías y trabajadores fabriles se enfrentaron dejando un saldo de una decena de heridos contusos en ambos bandos. En otros ciudades como Santa Cruz (este), Oruro y Potosí (sur) las manifestaciones transcurrieron sin incidentes.
"Pedimos que hagan una lectura cabal, que vean cómo ha sido la movilización, la participación de los sectores y (los ministros) de una vez le digan al Presidente que responsa positivamente para solucionar los temas que hemos planteado", afirmó Mamani.
La COB no solo plantea la abrogación del decreto 2765 que cierra Enatex y la restitución de los trabajadores a esa empresa, sino también la modificación a la Ley de Pensiones, una nueva Ley General del Trabajo y que se atienda la demanda de las personas con discapacidad que se hallan movilizadas por más de dos meses en La Paz, explicó el sindicalista.
"Están minimizando el paro, pero a partir de este jueves se integrarán más sectores a la huelga y seguramente habrá marchas y bloqueo de carreteras", anunció.
La más importante central sindical de este país sudamericano se halla enfrentada al Gobierno de Morales con el que hasta hace una semana mantenía un pacto político de respaldo al llamado proceso de cambio.
La COB inició sus medidas escalonas con un paro de 24 horas el pasado 20 de junio.
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