Mediante una carta, transmitida vía Internet, denuncian los crímenes cometidos contra los labriegos día a día por los efectivos de ambos cuerpos en la zona y piden actuar de modo urgente para evitar desenlaces peores.
La represión de la oligarquía hondureña, ligada a la producción de palma aceitera en el área y vinculada al gobierno instaurado tras el golpe de Estado de 2009, redundó en la muerte de 42 afiliados a organizaciones campesinas en el área, de septiembre de 2009 a octubre de 2011, afirman.
También más de 160 campesinos están sujetos a procesos judiciales y tres mil 500 familias enfrentan persecuciones, amenazas, intimidaciones constantes, añaden.
En Honduras, más de 600 mil familias carecen de tierra, sin que exista una estrategia agraria para solventar la grave problemática social por parte del Estado, asegura el documento, rubricado por los premios Nobel argentinos Nora Cortiñas y Adolfo Pérez Esquivel.
El Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras, la Organización Fraternal Negra y el Espacio Refundacional, entre otros, igual alertaron sobre la situación de terror que viven niños y niñas del Bajo Aguan y los traumas que arrastrarán por ello.
La misiva relata que en virtud del despliegue militar Relámpago, iniciado la semana anterior y supuestamente orientado contra la delincuencia organizada, un grupo de campesinos fue atacado y varios de ellos terminaron asesinados o heridos, en presencia de infantes.
"Por todo esto, levantamos nuestra voz de alerta y solicitamos una pronta y eficaz respuesta de parte de los pueblos, gobiernos e instituciones de Nuestra América en defensa de la vida y para sentar las bases para una justa resolución de los conflictos de fondo", agrega el documento.
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