Un comunicado difundido por Aladi sostiene que Álvarez "consideró, a título personal, que las declaraciones del presidente francés constituyeron una agresión absolutamente improcedente que roza el más rancio estilo colonialista".
"Amenazar a Uruguay de que puede ser un país apartado de la comunidad internacional es al menos una apreciación que llama al rechazo y la indignación de todos y sobremanera de los latinoamericanos", añadió.
"Álvarez señaló que coincide con las autoridades uruguayas que los temas pendientes en materia tributaria y de transparencia puedan ser tratados en los órganos de integración para que la región pueda desarrollar visiones y conductas comunes para afianzar la confianza interna entre nuestros países, su credibilidad internacional y exigir el respeto y la consideración de los países desarrollados", concluyó el comunicado.
El viernes pasado, al término de la cumbre del G20 realizada en Cannes (sur de Francia), Sarkozy incluyó a Uruguay dentro de una enumeración de paraísos fiscales y señaló que los "países que siguen siendo paraísos fiscales con la ocultación financiera serán apartados de la comunidad internacional".
La afirmación generó el fuerte rechazo de Uruguay, que llamó en consult
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