Radio del Sur publicó el escrito de un defensor oficial que la prensa española ocultó y prueba el armado judicial contra Venezuela en España
Resumen Latinoamericano/Radio del Sur - La Radio del Sur accedió a una presentación del defensor de oficio de Xavier Atristain Gorosabel, uno de los detenidos que, según la prensa española, involucró al ciudadano venezolano de origen vasco Arturo Cubillas con la ETA. En el escrito, el abogado denuncia que su defendido fue sometido una “gran presión psicológica y emocional” en dependencias de la Guardia Civil y detalla por qué esa declaración carece de valor judicial.
En el escrito de once páginas que La Radio del Sur publica íntegro, el defensor de oficio Alberto Jiménez Latorre le dice al juez Velasco que “es curioso, sorprendente y significativo que en la primera declaración del 1 de octubre”, Atristain “no haya manifestado nada al respecto de lo declarado el día 3 de octubre”, aunque según los agentes de la Guardia Civil la segunda declaración era apenas “una ampliación” de lo dicho en la primera.
Es en la segunda declaración cuando Atristaín -según la prensa española- asegura que recibió entrenamiento militar en Venezuela a manos de Arturo Cubillas, lo que fue desmentido por este ciudadano nacionalizado venezolano que llegó a Caracas gracias a un acuerdo entre los gobiernos de Carlos Andrés Pérez y Felipe González, hace más de 20 años.
El abogado defensor detalla las irregularidades en las declaraciones de su defendido, especialmente en la segunda, que se desarrolló “a la tres de la mañana”. Jiménez Latorre explica que fue citado sin las constancias de rigor, con su defendido cansado “y con la presión emocional” que supone declara de madrugada.
Y sigue el escrito, detallando que en esa declaración “se han vulnerado los derechos fundamentales más básicos y existe una total falta de garantía” lo que lo llevó a consignar un “NO CONFORME” junto a su firma, dejando constancia que lo que se le da a firmar “no coincide exactamente con lo declarado en mi presencia por el señor Atristián”.
El abogado detalla que durante la irregular declaración se aseguró que le exhibirían una fotografía al detenido, pero nunca lo hicieron en su presencia. La prensa española insistió reiteradamente que los detenidos “reconocieron en una fotografía” a Cubillas.
A través de este escrito incorporado al expediente, queda claro que eso no fue así o que si tal reconocimiento existió no tiene valor probatorio por realizarse lejos de las reglas mínimas de un interrogatorio judicial.
En el escrito el defensor -que no es cercano a los detenidos, y actúa de oficio tras ser sorteado por la Audiencia Nacional- detalla como él mismo fue presionado para que firmase la declaración sin objetarla. “Empezaron a acosarme”, denuncia el abogado y hasta le arrebataron el teléfono móvil y “comprobaron en contra de mi voluntad las últimas llamadas y SMS”. Jiménez Latorre denunció el acoso ante el colegio de Abogados en Madrid.
Pero las irregularidades van aún más allá. El abogado detalla que no pudo tener acceso al expediente y no logró volver a dialogar con su defendido.
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