Estados Unidos teme que el sitio WikiLeaks publique pronto cables diplomáticos secretos cuyo contenido sea tan incómodo que ponga en riesgo incluso relaciones bilaterales.
Londres, noviembre 26. Estados Unidos está advirtiendo a sus aliados en el mundo, incluida Colombia, que las anunciadas filtraciones que se prevé hará el portal WikiLeaks sobre archivos secretos estadounidenses causarán un bochorno internacional e incluso podrían dañar algunas relaciones bilaterales.
Algunos países potencialmente involucrados en los documentos serán Gran Bretaña, Italia y Colombia, pues son naciones a las que Washington ha advertido.
En Colombia, la portavoz de la embajada estadounidense Ana Duque-Higgins, dijo que el gobierno local ha sido alertado. "Hemos conversado con autoridades del gobierno de Colombia sobre las versiones de algunos medios de que algunos documentos del Departamento de Estado que han sido filtrados podrían aparecer en la prensa, y les hemos garantizado que las mantendremos al tanto de la situación conforme esta se desarrolle", dijo.
El embajador estadounidense en Londres, Louis Susman, alertó al gobierno sobre "el posible contenido de estas filtraciones", dijo el viernes Steve Field, portavoz del primer ministro británico David Cameron. "No deseo hacer conjeturas sobre lo que precisamente será filtrado antes de que ocurra", expresó Field.
El ministro del Exterior de Italia, Franco Frattini, dijo que conversó el viernes con el Departamento de Estado estadounidense, el cual le comunicó la posibilidad de que alguna filtración implique a Italia, pero que no le podía anticipar el contenido. "Nos referimos a miles y miles de documentos secretos que Estados Unidos no comentaría, como es su costumbre", expresó Frattini.
Los gobiernos de Canadá y Noruega también dijeron que recibieron la alerta de los diplomáticos estadounidenses, en tanto que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel declinó hacer declaraciones sobre el asunto.
En Irak, el embajador estadounidense James F. Jeffrey, dijo a la prensa que las filtraciones representan un obstáculo grave para la diplomacia internacional.
WikiLeaks, fundada por el australiano Assange Julian, se ha convertido en un sitio en internet sumamente incómodo para Estados Unidos y sus aliados, porque se ha dado a la tarea de revelar información que Washington ha querido mantener oculta, sobre operaciones posteriores a los atentados terroristas de septiembre de 2001.
En Estados Unidos, el Departamento de Estado advirtió al Congreso que espera pronto una dañina publicación de documentos diplomáticos secretos estadounidenses en el sitio.
En este momento, Assange tiene una orden de captura girada en Suecia, que él asegura que es parte de una campaña de los organismos de inteligencia occidentales para contrarrestarlo. Un tribunal de apelaciones de Suecia ratificó el miércoles la orden de detención para que sea interrogado por acusaciones de violación y abuso sexual.
El australiano de 39 años, que niega las acusaciones, había apelado la orden de un tribunal menor que permite que los investigadores le lleven ante la justicia y emitan una orden internacional de arresto. El tribunal de apelaciones de Svea rechazó el miércoles su apelación.
Assange, cuya organización ha publicado casi medio millón de documentos secretos sobre las guerras en Irak y Afganistán, está acusado de violación, abuso sexual y coacción ilegal.
Las acusaciones tuvieron su origen en encuentros de Assange con dos mujeres suecas durante una visita al país escandinavo en agosto.
El vocero del Departamento de Estado norteamericano P.J. Crowley dijo el miércoles que el gobierno no estaba seguro de cuáles documentos podría publicar el sitio próximamente, pero advirtió que podrían crear tensiones con otros gobiernos.
Crowley le dijo a reporteros que el Departamento lamenta cualquier publicación por WikiLeaks de documentos secretos. Dijo que se informó esta semana a paneles congresionales pertinentes de la probabilidad de que se diesen a conocer cables diplomáticos en los próximos días.
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