Cae bajo la lupa policial otro general estadounidense

13 de noviembre de 2012, 07:31Washington, 13 nov (PL) El Pentágono confirmó que su principal comandante en Afganistán, el general John Allen, está bajo investigación por causa de presuntas comunicaciones inapropiadas con una mujer civil. Un portavoz del Departamento de Defensa comentó que existe una "distinguible posibilidad" de que el expediente Allen tenga relación con una pesquisa del Buró Federal de Investigaciones (FBI) que provocó la renuncia del general David Petraeus. El jefe de la institución estadounidense, Leon Panetta, difundió una comunicación escrita en la cual explica que el FBI marcó con rojo a Allen desde el domingo 11 de noviembre y que él ordenó la indagación interna a partir del lunes 12. Se sospecha que el Comandante de las Fuerzas Internacionales con base en Kabul mantuvo entre 2010 y 2012 una interacción irregular con Jill Kelley, amiga de la familia Petraeus y cuyos avisos indujeron la abdicación del director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA). El presidente Barack Obama aceptó el pasado día 9 la dimisión del general (retirado) de cuatro estrellas Petraeus, principal ejecutivo en el organismo de espionaje de Estados Unidos. Petraeus presentó su carta de dejación, tras excusarse por un comportamiento personal impropio relacionado con una relación extramarital que él mismo calificó de inaceptable para un funcionario público de tan alto rango. Petraeus asumió en septiembre de 2011 la dirección de la CIA después de que el mandatario demócrata celebrara su labor contrainsurgente y política como parte de las intervenciones del Pentágono en Irak y Afganistán. Panetta aclaró que Allen permanecerá momentáneamente en su puesto de Afganistán, pero aconsejó que el Congreso federal apurara el nombramiento del general Joseph Dunford, como eventual sustituto del primero para la importante jefatura militar en el país centroasiático. Las revelaciones sobre John Allen son el más reciente capítulo del escándalo que sorprendió al público norteamericano casualmente solo tres días después que Obama ganara las elecciones presidenciales ante Mitt Romney. En el caso de Petraeus, está confirmado que mantuvo una relación amorosa oculta con la escritora Paula Broadwell, bajo investigación también por supuestamente tener acceso a información clasificada por la nomenclatura castrense norteamericana.