Honduras
Berta Zúñiga Cáceres
Entrevistamos a Berta Zúñiga Cáceres, activista indígena lenca y lideresa del COPINH (Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras),
sobre la situación actual en su país tras las movilizaciones contra
fraude electoral en las presidenciales del pasado mes de noviembre y
respecto a las novedades en el proceso judicial y las investigaciones
abiertas en torno al asesinato de su madre, Berta Cáceres.
El pueblo Lenca: 526 años de resistencia
Situado
al suroeste del país, cerca de Guatemala y haciendo frontera con El
Salvador, el pueblo Lenca es uno de los 9 pueblos indígenas originarios
de Honduras, el más importante en cuanto a población. En su territorio
brotan los manantiales que se convierten después, durante su recorrido,
en los ríos más importantes del país, desembocando finalmente en los
océanos Atlántico y Pacífico con los que Honduras limita.
“El
agua tiene una importancia vital en el desarrollo de nuestra vida. Es un
pueblo que vive principalmente del cultivo del maíz y del frijol,
también del café y las legumbres. El territorio, los ríos, la montaña,
el subsuelo, los cultivos, todo aquello que conforma nuestro ecosistema,
resulta esencial para entender y mantener nuestra cultura. En nuestros
territorios se mantienen prácticas culturales, espirituales e
identitarias ancestrales, como la ceremonia de pago a la Tierra, que es
la más importante. En esta ceremonia se regala y se homenajea a la
tierra por la vida que nos ha dado.”
El pueblo Lenca fue
uno de los que más resistencia directa opuso a la invasión española; en
represalia, sufrió un fuerte proceso de colonización. “Hoy, 526 años
después, sobrevive gran parte de su cultura, en la que la pertenencia a
la tierra y la vida comunitaria son aspectos fundamentales. A pesar de
preservar la cultura propia, hemos sufrido un proceso bastante
importante de neocolonización. La rebeldía histórica de pueblo lenca
contra los procesos de saqueo en los territorios, nos ha convertido en
un pueblo que simboliza la resistencia indígena a nivel nacional.”
El golpe de estado y sus proyectos de muerte
El
golpe de estado de 2009 y la consiguiente deposición del presidente
Manuel Zelaya, supuso una situación muy dura para la vida de las
comunidades indígenas. Trajo consigo la implantación de un proyecto
político basado fundamentalmente en un modelo económico extractivista y
en el saqueo de los territorios ancestrales, a través de las concesiones
a mineras e hidroeléctricas para la explotación de los ríos. “La
imposición de estas políticas a través del golpe, burló la decisión
democrática del pueblo hondureño al no permitir que concluyera el
mandato del presidente Zelaya. Supuso también la llegada de otro tipo de
proyecto mucho más perverso, como son las zonas especiales de
desarrollo económico que, hoy por hoy, son una prioridad para el nuevo
presidente hondureño Juan Orlando Hernández.”
El nuevo
presidente llegó al poder el pasado mes de noviembre entre acusaciones
de fraude y en medio de grandes movilizaciones de protesta en todo el
país que fueron violentamente reprimidas. “Hablamos de una reelección
ilegal que vulnera la constitución del país, donde se prohíbe
claramente la reelección presidencial. Pero más allá de esta cuestión
legal, porque en definitiva no se trata tanto de esto, como del proyecto
de violación de derechos humanos que representa para Honduras el nuevo
presidente. Se trata de la continuación de las políticas de saqueo
implantadas desde 2009, también del terror, la violencia y la muerte
para el pueblo hondureño y para su juventud.” Los jóvenes no tienen
oportunidades de desarrollar una vida profesional digna y se ven
obligados a trabajar en condiciones de marginalidad, a ver en el
ejército una alternativa laboral o a migrar hacia Estados Unidos o
España. Las mismas políticas suponen para las comunidades indígenas,
situaciones de exclusión social y de despojo de sus territorios. “Todo
esto es lo que significa para nosotras la relección de estas políticas,
llevadas a cabo frente a una gran resistencia popular que se ha
mantenido de forma permanente.”
En esta lucha, se han
pisoteado los derechos humanos a través del reforzamiento de las fuerzas
de seguridad del estado; el ejército, las fuerzas especiales, la
policía, la policía militar… “El aumento del presupuesto anual para
la llamada seguridad nacional, sólo amplifica la violencia y sirve para
garantizar la explotación de los territorios, ya que son los militares
quienes custodian las infraestructuras de los proyectos hidroeléctricos y
mineros y quienes agreden a la población campesina. Esta militarización
se impone violentando la decisión de la mayor parte de la población que
rechaza estos proyectos a pesar de que en los medios de comunicación
pretendan hacer creer lo contrario.”
Son varios los bancos y
las empresas europeas, que financian y promueven estos proyectos con
grandes inversiones, a los que Berta critica por pretender vender la
imagen de que están contribuyendo al desarrollo del país. “Gran parte
de las inversiones de la supuesta energía limpia, que aquí son energías
asesinas, no repercuten en beneficios para las comunidades indígenas,
sino que sirven para profundizar en la explotación de los territorios,
con proyectos turísticos, con maquilas o con el megaproyecto del
corredor de producción eléctrica para Mesoamérica.”
En los
territorios del pueblo Lenca se han aprobado numerosos proyectos de
concesiones a hidroeléctricas desde 2010. Una línea política que no se
detuvo hasta que el 2 de marzo de 2016 sucedió el asesinato de la
coordinadora general del COPINH, Berta Cáceres, en un contexto de muchas
acciones de violencia y asesinato en las comunidades indígenas. “El
asesinato de la compañera Berta, una lideresa ancestra y símbolo de
resistencia y rebeldía para el pueblo lenca, ha tenido una gran
repercusión internacional, lo que ha provocado que el gobierno hondureño
tenga muchos problemas para demostrar a nivel internacional que puede
mantener la estabilidad económica en el país.”
El caso Berta dos años después de su asesinato
El
pasado 2 de marzo se cumplieron dos años del asesinato de Berta
Cáceres, madre de nuestra entrevistada. Ese mismo día se hizo pública la
detención del noveno imputado en el crimen, David Castillo Mejía,
presidente ejecutivo de la empresa DESA ( Desarrollos Energéticos S.A.),
empresa responsable del proyecto hidroeléctrico Agua Zarca en
territorio lenca. En este proceso existe una segunda causa
abierta por asesinato en grado de tentativa, cometida contra el
activista mexicano Gustavo Castro que logró salvar la vida la misma
noche que mataron a Berta en su propia casa. “Pensamos que el juicio
de David Castillo se demorará todavía dos años, para nosotros esto es
una muestra de la llamada “justicia a cuentagotas”, ya que esta persona
fue señalada por mi mami en vida y cuando sucedió su asesinato también
fue señalada inmediatamente por nosotros. Se trata de alguien que
coordinó y dispuso las condiciones logísticas para cometer el asesinato;
lo planificó y tomó la decisión en conjunto con otras personas de la
junta directiva. Dos meses después del crimen, se presentaron las
primeras pruebas contra él, suficientes para condenarlo, sin embargo,
la justicia ha esperado hasta dos años para procesarlo. El gobierno
tenía la esperanza de que la presión internacional decayera, pero no ha
sido así.”
David Castillo se encuentra actualmente en prisión preventiva al igual que los otros ocho imputados en el crimen. “Llama
la atención que en su defensa participan los mismos abogados que ya
representaban a DESA, la empresa responsable del proyecto Agua Zarca. La
empresa empieza a sentirse mucho más amenazada, ya que como presidente
ejecutivo David Castillo, no deja de ser un subordinado de la junta
directiva que controla la familia Atala, a la que nosotros hemos
señalado muchas veces como parte intelectual del crimen. La familia
Atala es una de las más poderosas del país, está protegida por el
gobierno hondureño y es muy complicado que alcancemos a imputarla.
Consideramos que la detención de David Castillo es un sacrificio que
ellos han realizado para poder decir que ya se conoce al autor
intelectual del crimen y que por tanto no hace falta seguir investigando.”
El
juicio de los ocho primeros encausados ya no será en junio como estaba
previsto, si no que se aplazó y tal vez no comience hasta el mes de
agosto o principios de septiembre. El proceso de David Castillo tardará
mucho más. “Sucede que está a punto de acabar el plazo para la
prisión preventiva, lo que significa que, si no tienen lugar los
juicios, en noviembre estas personas tienen que salir en libertad. No
creemos que llegue tal caso ya que de ser así, al gobierno se le caería
esta cortina de humo que ha levantado con las detenciones.”
El sistema de dominación múltiple y la solidaridad internacional
Honduras
uno de los países más peligroso del mundo. Hay 14 personas asesinadas
por defender derechos fundamentales en lo que va de año y son más de 130
desde el golpe de estado de 2009. A la empresa DESA se le relaciona con
5 muertes, entre ellas, la de la madre de Berta. Las agresiones que
sufren las comunidades indígenas en su país, Berta las enmarca en un
escenario global que hace necesaria la solidaridad internacional entre
los pueblos. “Nosotras tenemos la necesidad de defender la vida, la
tierra y a las futuras generaciones, como dicen siempre acá nuestras
abuelas. Yo siento que hay una política mundial destinada al saqueo de
los territorios que profundiza cada vez más en la violencia debido a la
resistencia que se está dando en muchos lugares frente a estas
agresiones. Estás políticas forman parte de un mismo sistema de
dominación patriarcal, racista y capitalista; un sistema de dominación
múltiple que funciona de forma articulada y de manera también articulada
tenemos que responder. En este sistema de dominación múltiple, la
solidaridad para los pueblos que vivimos de manera más dura estas
políticas del saqueo con todo lo que conllevan, las muestras de
solidaridad son muy importantes porque nos brindan protección política,
lo que nos permite articular las luchas y trabajar conjuntamente.”
El
concepto de neocolonización señala que, siglos después de invasión en
Latinoamérica, en Europa se sigue haciendo negocio con la explotación de
estos pueblos.
“Muchos bancos y empresas que están
promoviendo estas energías limpias que acechan los territorios, son en
su mayoría europeas o están encuadradas en el norte global. Nosotros
necesitamos la articulación de los pueblos que están sensibilizados con
nuestras luchas, para presionar a los bancos y a las empresas que
financian estos proyectos. Queremos que salgan a denunciar cuando sepan
de sus agresiones a los derechos de los pueblos indígenas y a la
población en general. La solidaridad es lo que nos permite, en medio de
toda esta violencia y de tantas dificultades, sentirnos humanos y sentir
la esperanza de que realmente hay otra manera de vivir más dignamente,
con justicia, con libertades y de una manera autónoma.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario