(Foto: Archivo)
Los choferes amanecieron a las puertas de la terminal, que tiene a su cargo líneas de ómnibus en el norte y el oriente de Santiago de Chile.
El paro comenzó la víspera y, según los trabajadores, la respuesta de la empresa fue despedir a unos 280 choferes y 30 dirigentes sindicales.
En un comunicado, la compañía dijo que los empleados declarados cesantes fueron 150.
Los trabajadores presentaron un pliego de demandas que exige mejoras salariales y modificaciones en los horarios laborales, pero hasta ahora la patronal hizo oídos sordos a los reclamos.
La dirigencia obrera exige además la instalación de una mesa tripartita, en la que participe el sindicato, la empresa y representantes del Gobierno.
Este martes la presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores de Chile, Bárbara Figueroa, se presentó a las puertas de la terminal de Red Bus y ofreció su apoyo a los asalariados.
“El transporte en la región metropolitana es estratégico, por lo que representa para el traslado de los ciudadanos a su fuente laboral, pero la calidad del servicio no puede ser a costa de la salud de los trabajadores”, expresó Figueroa, en alusión a la extensión de la jornada de faenas ordenada por la empresa.
La semana pasada los choferes de Red Bus convocaron a un paro similar, que devino en amenazas de despidos por parte de la gerencia.
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