En una entrevista en Radio Cayambe, el mandatario señaló que el proyecto político en el gobierno está enrutando al país hacia el Buen Vivir y en los próximos 20 o 25 años se podría salir del subdesarrollo si se sigue trabajando bien.
"Es un proyecto que debe continuar y no ser bloqueado por las ambiciones de siempre", apuntó Correa tras señalar que existen grupos que se oponen al proyecto social porque no están en el poder y no porque no se estén haciendo las cosas bien.
Ejemplificó que en el seno de la Asamblea Nacional hay diputados que nunca han votado a favor de las propuestas gubernamentales, hecho que da la medida de esa oposición férrea.
Respecto al proceso eleccionario de febrero de 2013, señaló que existe en el país una proliferación de movimientos y partidos que, según su opinión, no debería ser, aún cuando es una situación conveniente.
Explicó que mientras más divisiones existan entre esos grupos opositores, es más fácil consolidar la propuesta y ganar las elecciones, pero no es correcta para el país esa dispersión, por lo cuál propone consolidar tendencias.
Correa rechazó que no haya un vínculo con las bases indígenas y señaló que prevalece un diálogo constante, aunque no con todos sus dirigentes, a algunos de los cuales calificó de "ciertos pseudo representantes".
Aseveró que este un gobierno de los trabajadores, de los indígenas, del pueblo, y se dialoga constantemente con muchísimos gremios.
Sin embargo, dijo, hay grupos minoritarios intransigentes que no le hacen bien a nadie, sino que dañan a esos sectores a los que dicen representar.
"Tenemos el apoyo de la mayoría de los indígenas", apuntó el presidente al exponer que precisamente éste ha sido uno de los sectores más beneficiados, por ejemplo, en el acceso a las universidades y en la reducción de la pobreza.
Imbabura, argumentó, es uno de los territorios más poblados por indígenas y allí precisamente la Revolución Ciudadana ha sido imbatible.
La mayoría de los indígenas, dijo, se dan cuenta cuál es el Gobierno que más les ha generado desarrollo, bienestar y que más se ha preocupado por la exclusión histórica de los pueblos ancestrales.
Reiteró su llamado a las bases del Movimiento Alianza PAÍS a trabajar cada día como si no tuvieran un voto, aún cuando el 80 por ciento de los ecuatorianos expresa en las encuestas el respaldo popular, para dar continuidad al gobierno de la Revolución Ciudadana.
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